Este martes se presentó de manera oficial “Federal”, el aceite de cannabis producido íntegramente en la provincia. Diversos especialistas destacan sus amplios beneficios en el ámbito de la salud.
En Radio La Red el Dr. Aarón Kaen, director del área de Enfermedades Crónicas no transmisibles en la provincia, sostuvo que “es significativo que se produzca y distribuya desde La Rioja”. Aseguró que cuenta con los mejores índices de calidad y trazabilidad que se requieren.
“Son poblaciones que necesitan la medicación porque quizás los tratamientos médicos convencionales no les son suficientes. Tenerlo en nuestra provincia es un lujo y nos tenemos que sentir orgullosos como riojanos”, analizó.
Este primer lote de 3 mil aceites, serán distribuidos 2 mil unidades en farmacias privadas para su comercialización, y las mil dosis restantes en hospitales y centros primarios de salud. Se requerirá prescripción médica para acceder al aceite, aunque Kaen aclaró que no es doble receta ni receta archivada.
Aclaró que el aceite del mercado alternativo muchas veces puede llegar a ser contraproducente, ya que no cumple con la trazabilidad y no sabemos realmente cómo está compuesto. En cambio, “Federal”, cumple estrictamente con todos estos pasos.
El cannabis como medicina alternativa
Desde el punto de vista de la indicación médica, Kaen planteó que su utilidad tiene una mayor evidencia científica en epilepsias refractarias a tratamiento convencional, las encefalopatías que producen convulsiones en los niños. También hay varias patologías que se vieron beneficiadas con distintos índices de eficacia clínica, como el dolor crónico, el dolor oncológico, las artritis, artrosis y fibromialgia.
Remarcó que tiene principal eficacia el CBD, que es un “alto compuesto antiinflamatorio que es 100 veces más potente que una aspirina”.
Otras indicaciones son las enfermedades inflamatorias intestinales, que cursan con diarreas y sangrado crónico como la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa, en pacientes que no respondieron a los tratamientos convencionales.
Asimismo se han visto beneficios en los pacientes con tratamientos quimioterápicos con efectos adversos como náuseas o vómitos; y en personas con enfermedades neurodegenerativas, como Parkinson y Esclerosis múltiple, por nombrar algunas de las enfermedades más conocidas.
Los desafíos a futuro
Ahora que el aceite ya es una realidad y su distribución ya es un hecho, el doctor hizo hincapié en la necesidad de continuar formando al personal médico, para que los profesionales tengan las herramientas requeridas para indicarlo de manera segura y precisa.
Como segundo objetivo, expresó su deseo de que toda la comunidad sepa que “se trata de un producto medicinal que se va a utilizar con mucha seriedad”. “Estamos hablando de una sustancia que durante mucho tiempo se relacionó con la adicción, pero hay estudios científicos y evidencia que dejan en claro su utilidad cuando es prescripto responsablemente por el médico”, aclaró para concluir.