El precio del pan aumentó a partir de este lunes y el kilo en los mostradores ya ronda entre los $50 y $60.
La suba se produjo a partir de un incremento que la Cámara de Empresarios de la Panificación y Afines le aplicó a los repartidores.
A partir de este lunes, la cámara empresaria elevó el precio de $22 a $35 para los repartidores, es decir, a los que luego llevan el producto a las distintas panaderías. Por eso el precio se trasladará a los mostradores y pasará de los actuales $50 a aproximadamente $60.
De todos modos, el porcentaje de incremento para el consumidor final, lo fija cada panadería según su propio criterio, es decir, no hay un precio unificado. "Nosotros desde nuestro cámara sugerimos un incremento porque no somos formadores de precios. Después cada industrial pondrá el precio que más le convenga para su producto. Hace cinco meses que no retocábamos el precio y eso en un país como la Argentina es mucho", comentó al respecto Oscar Carrizo, presidente de la Cámara de Empresarios de la Panificación y Afines.
El empresario justificó la suba al sostener que el sector ha debido soportar un fuerte incremento en los costos fijos, en especial impulsados por el aumento del combustible y el gas. "Es de público conocimiento que todo ha subido, ya no se sabe qué es caro y qué es barato. Lo que más nos golpea es la suba del combustible y también nos afecta mucho la suba del gas. Esto nos lleva a tener que retocar los precios debido a que no podemos seguir produciendo en estas condiciones", explicó.
Carrizo subrayó que la harina no es el rubro que más afecta al sector. "El pan no sólo se hace con harina, que se siempre se dice que no subió tanto. Tenemos costos fijos como por ejemplo los servicios. Acá en La Rioja por gastos de logística y de impuesto del abasto, por cada bolsa de harina pagamos entre $65 y $75 de sobrecosto", completó.