Este lunes, cuando el primer contingente de turistas que recorría el Parque Ischigualasto llegó a la estación El Submarino, notó un paisaje diferente. En ese momento descubrieron que la formación geológica había perdido una de sus dos chimeneas. Aparentemente, la forma más icónica del parque se rompió por la acción del intenso viento.
"Es una imagen distinta la que vemos ahora. Llamativamente, la que se cayó fue la chimenea más grande, que tenía entre 40 y 50 metros de altura. En realidad la que estaba más endeble era la otra", comentó el encargado del Ente Autárquico, Silvio Atencio.
A la vez, Atencio destacó que por suerte en ese momento, no había gente en el interior del parque, por lo que no hubo daños. "Ni siquiera hemos tenido que limpiar el lugar, porque cuando el bloque cayó se desintegró", afirmó.
Los antecedentes
Así como las formaciones son generadas por la erosión del viento, el agua y demás impactos del clima, también cambian por los esos fenómenos.
Como consecuencia, esta no es la primera vez que una formación sufre roturas.Entre las que cayeron, las más recordadas son las conocidas como El Loro y la Lámpara de Aladino.
Fuente: http://www.diariodecuyo.com.ar/home/new_noticia.php?noticia_id=676752