<div style="text-align: justify;">Hace unas semanas, concejales de La Rioja aprobaron el <b>cambio del nombre de la Avenida Rivadavia por Victoria Romero, proyecto que fue impulsado por el concejal peronista Walter Romero. </b>La iniciativa provocó grandes controversias entre los riojanos, cuestionando la importancia que se le dio al tema, en comparación a otras necesidades sociales y económicas que actualmente se encuentran sin resolver. Sin embargo, <b>el proyecto se llevó adelante en el marco por el mes de la mujer y obtuvo su aprobación.</b></div><div style="text-align: justify;"><br></div><div style="text-align: justify;">En este sentido, <b>Roberto Rojo</b> reconocido historiador de La Rioja, en su participación diaria como comentarista de <b>La Mañana de La Red</b>, expresó su argumento y postura reivindicando el Rol de esta mujer en la historia de La Rioja. “Es una mujer desconocida aún por los riojanos y el país. El proyecto de cambio de nombre de la Avenida Rivadavia- quien era defensor de los intereses centralistas- por el de Victoria Romero tiene que ver con <b>proponer a alguien que luchaba por La Rioja, una provincia líder del federalismo</b>, y de ese punto de vista es muy difícil no apoyar”, aseguró Rojo.</div><div style="text-align: justify;"><br></div><div style="text-align: justify;">“Nosotros siempre marcamos que puede ser insuficiente el cambio de nombre porque las calles se desvinculan de los personajes históricos. Victoria Romero era una mujer muy singular, esposa de Ángel Vicente Peñaloza que nació en Chila cerca de Tama. Se casó con el Chacho y tuvieron cuatro hijos de los cuales sobrevivieron dos”, agregó. </div><div style="text-align: justify;"><br></div><div style="text-align: justify;">Además resaltó que “Ella se destacó por acompañar al campo de batalla a Peñaloza en el episodio sobresaliente de la batalla el Malantial, estuvo al mando de una pequeña partida en donde le salva la vida a Ángel Vicente Peñaloza y en consecuencia recibió un hachazo en la frente, particular cicatriz que la caracteriza”.</div><div style="text-align: justify;"><br></div><div style="text-align: justify;">“José Hernández fue el principal biólogo del Chacho, que escribió sobre su asesinato. Fue una biografía periodística notable y queda ese testimonio. Celebramos la imposición del nombre, y como estudiantes de la historia nos gustaría que esto se traslade a las escuelas, que haya una mayor señalización en las calles”, resaltó Rojo. </div><div style="text-align: justify;"><br></div><div style="text-align: justify;">Asimismo el historiador remarcó que “hay otras cosas a discutir y que aún están pendiente en el Valle de Antinaco hay un cartel que dice la cueva del Chacho y la palabra cueva es despectivo, debería llamarse refugio del Chacho, realizamos notas, artículos haciendo ese reclamos pero aún no se cambia. Una de las cosas que Mitre impone para declarar la guerra a La Rioja es que le quita su carácter político y lo reduce a bandolerismo, no son unos luchadores sino unos delincuentes comunes, asaltantes y el término “cueva”, consideramos que reafirma ese concepto”.</div><div style="text-align: justify;"><br></div><div style="text-align: justify;">En un intento, por destacar la función de Victoria, el historiador riojano indicó que “Fue una mujer luchadora del federalismo que estuvo a la par de su marido en el marco de las luchas federales de Facundo y el Chacho como así también Varela, que sufrió muchísimo cuando su amado esposo fue asesinado, descuartizado y desaparecido, porque fue uno de los primeros desaparecidos de la argentina, el primero fue Laprida”. </div><div style="text-align: justify;">“Victoria Romero no sólo quedó viuda sino que también fue despojada, ella pierde todos sus bienes su documentación y después del crimen de su marido fue llevada a San Juan, humillada en donde la hacían barrer las calles, el gobernador era Sarmiento y estaba muy feliz por la forma en que decidió asesinarlo a Peñaloza. Vivió en condiciones de pobreza”, afirmó Rojo.</div><div style="text-align: justify;"><br></div><div style="text-align: justify;">Al finalizar, recordó que “Ella muere a los 86 años, tuvo tiempo para ver el desarrollo del proceso político post federalismo en donde La Rioja hasta hoy es dependiente del poder central. Vino de una familia muy laboriosa, de los Llanos de La Rioja, un lugar muy próspero, del cual surgió esta mujer que luchó incansablemente por los ideales de una Rioja federal”. </div><div style="text-align: justify;"><br></div><div style="text-align: justify;"><br></div><div><div style="text-align: justify;"><b><font size="5">Un poco mas de historia</font></b></div><div style="text-align: justify;"><br></div><div style="text-align: justify;">Nació el 2 de abril de 1804 en Chila, a 5 km de Tama, provincia de La Rioja, Argentina. Era hija de Bartolomé Romero y de Ana María Herrera.</div><div style="text-align: justify;"><br></div><div style="text-align: justify;">El 10 de Julio de 1822, se presentó don Ángel Vicente Peñaloza; hijo legítimo de don Esteban Peñaloza y de doña María Úrsula Rivero; vecinos de Malanzan con Victoria Romero del mismo lugar, hija de Bartolo Romero y de Ana María Herrera siendo testigos de la ceremonia Teodoro Pavón y José María Vera.</div><div style="text-align: justify;"><br></div><div style="text-align: justify;">De este matrimonio nació María Mercedes en 1823 y María Facunda 1824, ambas fallecidas a muy corta edad.</div><div style="text-align: justify;"><br></div><div style="text-align: justify;">Doña Vito (así llamaban a Victoria Romero) fue llamada por el destino a luchar incansablemente junto a su marido en aquellas horas aciagas para los riojanos. Fue estandarte y orgullo de aquellas legiones de titanes que, en la pelea, sacan fuerzas de la nada para arrojar al sanguinario invasor.</div><div style="text-align: justify;"><br></div><div style="text-align: justify;">En la batalla del Manantial, librada por el Chacho contra fuerzas federales en 1842, Victoria realizó una hazaña que cimentó su fama, quien, viendo el peligro en que se hallaba su esposo, reúne unos cuantos soldados y poniéndose a su frente se precipita sobre los que atacaban a Peñaloza, con una decisión que habría honrado a cualquier guerrero”.</div><div style="text-align: justify;"><br></div><div style="text-align: justify;">El gesto le valió recibir un feroz sablazo sobre su cabeza, causándole una herida desde la frente hasta la boca. La tremenda cicatriz desfiguró el rostro de Victoria, que la disimulaba cubriéndose el rostro con un manto.</div><div style="text-align: justify;"><br></div><div style="text-align: justify;">Después del asesinato de su esposo, ya viuda tras el vil asesinato de su esposo Chacho Peñaloza, fue humillada por el lamentable “prócer” Domingo Sarmiento que la despojo de sus bienes y la condenó a barrer la plaza del pueblo, luego de la decadencia y derrota riojana que fue su propia derrota.</div><div style="text-align: justify;"><br></div><div style="text-align: justify;">Victoria Romero falleció el 21 de noviembre de 1889 a los 85 años de edad y se le dio sepultura en el oratorio de Atiles, cerca de Malazán.</div></div><div><br></div><div><br></div>