En esta oportunidad se tomó declaración a “Coca”, viuda del laico, y a dos de sus hijas. “Fue una jornada positiva en términos judiciales, para que los jueces tengan el panorama contado por los propios protagonistas”, indicó el titular de la Secretaría de Derechos Humanos, Délfor Brizuela, en La Red.
El Tribunal Oral Federal (TOF) de La Rioja concretó este viernes la segunda audiencia en el juicio oral y público por el asesinato del dirigente campesino Wenceslao Pedernera, integrante de la pastoral de Monseñor Enrique Angelelli. Fue acribillado por un ‘grupo de tareas’ frente a su familia el 25 julio de 1976.
Por esta causa hay un único imputado y es el ex gendarme Eduardo Abelardo Britos, acusado de ser autor intelectual del hecho cuando se desempeñaba como jefe del Escuadrón 24 de Gendarmería con sede en Chilecito.
Sin lugar a dudas se trató de una jornada muy movilizante, que dejó estremecidos a todos los presentes, “sintiendo el horror que vivió esa familia en soledad, sin recursos prácticamente”, como lo detalló el secretario de Derechos Humanos.
Relataron por ejemplo cómo fueron los días previos a aquel fatídico 25 de julio, pero también cómo fue aquella noche cuando golpearon a la puerta de la familia Pedernera en Sañogasta.
“Golpearon la puerta en la madrugada. Él salió cómo padre de vivienda, creyendo que era un vecino que necesitaba alguna ayuda”, relató Brizuela siguiendo de cerca los recuerdos de la familia y agregó con gran conmoción: “Se dice que había en el piso 25 proyectiles. Lo acribillaron a balazos”.
Lo cierto es que no murió en el lugar, sino que fue asistido y trasladado rápidamente por su esposa, sus hijas y un vecino que las ayudó, hacia Chilecito. Allí, denunciaron que por orden del “grupo de tareas” Wenceslao fue dejado a un lado hasta morir, sin recibir la intervención médica que ameritaba el caso.
La próxima audiencia tendrá lugar el viernes 12 de mayo. En la ocasión será citada a declarar la hija mayor de Wenceslao -que en ese momento tenía 15 años-, junto al laico “Vitín” Baronetto, quien trabajó mucho en la investigación histórica de los hechos.