El nuevo billete de 2.000 entrará en circulación durante esta semana. Para este nuevo billete se eligió a las figuras de los médicos argentinos Cecilia Grierson y Ramón Carrillo.
“El nuevo billete, diseñado en colaboración con Casa de Moneda, conmemora el desarrollo de la ciencia y de la medicina en la Argentina y tendrá como protagonistas al Instituto Malbrán, y a la Dra. Cecilia Grierson y al Dr. Ramón Carrillo, precursores en el desarrollo de la medicina de nuestro país”, destacó el Banco Central a través de un comunicado oficial.
En cuanto a los personajes elegidos para representar el billete de nueva denominación el Banco Central resaltó el rol clave de la Dra. Grierson durante la epidemia de cólera que afectó a la Ciudad de Buenos Aires en 1886 y la gran transformación en la salud pública, desde una concepción social de la medicina.
La doctora Grierson, nació en la Ciudad el 22 de noviembre de 1859, cuando Buenos Aires todavía ni siquiera era la Capital Federal del país. Su padre se llamaba John Parish Robertson Grierson, hijo de William Grierson, un inmigrante escocés que llegó a la Argentina en 1825. Su mamá fue Jane Duffy, hija de irlandeses. Y Cecilia fue la mayor de seis hermanos (Catalina, David, Juan, Tomás y Diego, eran los otros cinco).
Hizo la primaria en colegios ingleses y luego su familia se radicó en una colonia escocesa en la provincia de Entre Ríos, que también trabajaba en zonas del Uruguay. Tras la muerte de su papá, a los 13 años empezó a trabajar como maestra rural, aunque no tenía ningún título habilitante. Aquello era común en esos tiempos y el sueldo lo cobraba su mamá.
Radicada después en Buenos Aires, hizo la Escuela Normal y a los 19 años se recibió. “Creo que nací para ser maestra”, solía repetir. Pero su destino era otro. Angustiada por la enfermedad de su amiga Amalia Kenig, quiso dedicarse a la Medicina para ver la posibilidad de ayudarla a recuperarse. Kenig sufría de un problema respiratorio crónico y Grierson no pudo evitar su muerte. Pero igual, en 1883, ingresó a la Facultad de Ciencias Médicas y el 2 de julio de 1889 se recibió. Claro que antes tuvo que superar muchas vallas por ser una mujer que se atrevía a actuar en un ámbito hasta entonces reservado para los hombres.
Ya en medio de su carrera universitaria, Grierson iba a mostrar que lo suyo no sólo pintaba para ser una buena profesional, sino también para mostrar su condición de líder y lograr avances. Por ejemplo, en 1886 creó la Escuela de Enfermería del Círculo Médico Argentino. Eso fue sólo un eslabón de su amplia actividad: en 1891 fue una de las fundadoras de la Asociación Médica Argentina; en 1892 colaboró con la realización de la primera cesárea en el país y en 1900 fundó el Consejo Nacional de Mujeres y la Asociación Obstétrica Nacional. Es que un año antes había estado en Londres (fue la vicepresidenta del Congreso Internacional de Mujeres) para después pasar casi medio año en París, perfeccionándose en Ginecología y Obstetricia, su especialidad médica.
Lucha por los derechos femeninos
Junto con Alicia Moreau de Justo, Elvira Rawson y Julieta Lanteri iniciaron la lucha por los derechos civiles y políticos femeninos, impulsadas por los debates y protestas que se sucedieron durante la primera década del siglo XX.
Algunos de estos temas son los que desarrollamos en nuestra exhibición “Los rostros de la Argentina Moderna”.
Fue elegida como presidenta del Primer Congreso Femenino Internacional, que se realizó en mayo de 1910 en el salón de la sociedad Unione Operai Italiani que estaba en la calle Cuyo 1356 (actual calle Sarmiento). Ejerció la docencia universitaria y en su consultorio particular se ocupó también de los niños sordomudos.
Su legado
Cecilia Grierson pasó sus últimos años con una magra jubilación en una propiedad en la localidad de Los Cocos (Córdoba), que en 1924 donaría al Consejo Nacional de Educación para que sea la escuela que lleva su nombre.