Nacido en Córdoba, pero mendocino por adopción, Nicolás del Caño, con sus 35 años, es el candidato presidencial más joven entre los seis competidores. Diputado nacional desde 2013, integra el Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS), agrupación que en las PASO de agosto venció (con sorpresa mediante) al Partido Obrero (PO) y a la Izquierda Socialista (IS), sus aliados dentro del Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT).
– En este final de campaña se habla mucho del “voto útil”. ¿Qué significado le dan ustedes?
– El Frente de Izquierda es el único voto útil que tienen los trabajadores, los jóvenes para marcar un mensaje muy fuerte al poder económico y político. Es decirle “no” al ajuste o la mano dura que postulan los candidatos como Scioli, Macri o Massa. Nuestro voto útil, por ejemplo, quiere avanzar en los derechos de las mujeres como el derecho al aborto legal.
Otro tema fundamental: ellos prometen cosas que no van a cumplir. Scioli prometió un millón de viviendas cuando en el último presupuesto de la provincia de Buenos Aires, donde hay un déficit de un millón y medio de viviendas, propuso construir siete mil, con el único voto en contra del Christian Castillo, del FIT.
– Macri también promete un millón…
– Un millón de créditos promete. Hablan sin aclarar cómo van a conseguir estas cosas. Nosotros lo decimos claramente: afectando los intereses de los grandes empresarios. Un impuesto progresivo a las grandes fortunas es una de las vías para financiar la obra que empiece a satisfacer la demanda de tres millones y medio de familias en emergencia habitacional.
– ¿Y qué utilidad tiene el voto para el FIT?
– Dos cosas. Mientras más votos reciba nuestra fórmula presidencial, más claro será el mensaje: si Scioli, Macri o Massa quieren aplicar un ajuste van a tener una fuerte oposición en las calles. La otra utilidad es la posibilidad de que el FIT tenga nuevas bancas en el parlamento. Vamos a disputar dos bancas en la provincia de Buenos Aires, una en la Capital Federal, otra en Córdoba; Noela Barbeito tiene muchas chances en Mendoza, y existe alguna expectativa en Santa Fe.
– Entre 5 o 6 bancas.
– Sí, las que se sumarían a las tres que ganamos en 2013. Estamos ante la chance de que la fórmula que comparto con Myriam Bregman sea la más votada que tuvo la izquierda anticapitalista en las últimas décadas.
– El FIT también propone un sistema de bancas rotativas. ¿Cómo es eso?
– El FIT se compone por tres fuerzas políticas y la idea de rotación surge para que las tres fuerzas compartan las bancas. Ahora se rota en función de la proporción de votos que cada fuerza sacó en las PASO. Por ejemplo, el PTS ocupará un 45% del tiempo que dure el mandato de las bancas en la CABA y provincia de Buenos Aires, o un 40% del tiempo en Córdoba.
Con esto demostramos que no buscamos atornillarnos a ningún sillón. Además, nuestros legisladores cobran el salario de un trabajador y al resto de la dieta la aportamos a luchas populares o de los trabajadores.
– ¿Cómo se para el FIT frente a un eventual balotaje?
– Vamos a llamar a darle la espalda a Scioli, Macri o Massa. Sería un engaño al pueblo trabajador decirle, como explican sectores progresistas del kirchnerismo, que votar a Scioli es un mal menor.
– “El mal menor”, una variante del “voto útil”…
– Claro. A eso ya la vimos con la Alianza. En aquel momento, se decía que había que votar a De la Rúa, porque aunque fuese radical o conservador, era menos malo que Duhalde y Menem. Rebajó las jubilaciones y los sueldos, hubo un ajuste en la educación. El “mal menor” termina siendo una receta contra los trabajadores. Para el balotaje vamos a impulsar el voto en blanco.
– De las discusiones de campaña, ¿qué propuesta oficialista u opositora le generó más rechazo?
– Muchas cosas, pero la más alarmante es el planteo de Massa de sacar el Ejército a la calle, llevarlo a los barrios humildes para combatir el narcotráfico cuando se han encontrado narcos en el Nordelta. Tenemos el ejemplo de México: desde el 2006 hasta la fecha, según cifras oficiales, a partir de la política de la CIA y la DEA de declarar la supuesta guerra al narcotráfico, han muertos 70 mil personas. Según cifras extraoficiales, ya hubo 130 mil muertos.
– Casi todos los candidatos coinciden en eliminar Ganancias.
– En el Congreso hicimos una sesión especial para tratar Ganancias que no tuvo quórum. Nosotros propusimos la eliminación del impuesto porque el salario no es una ganancia.
– Esa misma frase usa Massa.
– Sí, por pura demagogia. En el Congreso, menos nosotros, la oposición solo habla de subir el mínimo no imponible.
– Otra discusión de campaña ha sido el cepo. ¿El FIT tiene posición tomada?
– El pequeño ahorrista compra dólares porque no tiene posibilidad de comprar bienes, como una vivienda. Pero en cuanto a los dólares, no creemos que falten. Lo que hay es una fuga de dólares a través de la evasión y la banca privada.
Planteamos entonces la nacionalización de la banca en manos de los trabajadores para impedir la fuga de capitales y proteger el ahorro nacional. Esto implica un cepo gigante pero para los que fugan divisas.
Fuente: Los Andes