La CGT encabezó una marcha en el centro porteño por el Día del Trabajador y ratificó el paro del próximo 9 de mayo al afirmar que la Argentina “estaba mal y ahora está peor”.
“Tenemos una agenda de reclamos muy claros, que tienen que ver con la situación social, con las decisiones que se fueron tomando a lo largo de estos meses de gobierno, decisiones que tuvieron que ver con un ajuste brutal sobre los sectores más vulnerables”, subrayó el cosecretario general de la central obrera Héctor Daer.
Respecto a la aprobación en la Cámara Baja de este martes, aclaró que la CGT no “discutió, ni negoció ningún proyecto, ni dictamen, ni media sanción que ocurrió en la Cámara de Diputados”.
“También nos preocupa las cuestiones del empleo público, que siga vigente el DNU y que se sigan cerrando instituciones. Nos interesa que se rediscuta el capítulo del sector público, por eso le pedimos al Senado que queremos hablar con todos los sectores”, sumó.
Por su parte, el Consejo Directivo de la Confederación General del Trabajo (CGT) publicó un documento en donde expresó su rechazo frente a las medidas económicas del Gobierno y planteó la construcción de un programa de consenso multisectorial “hacia una Agenda de diálogo para una Argentina del Desarrollo, la Producción y el Trabajo”.
El texto señaló que “todos los derechos sociales, laborales, sindicales y previsionales se encuentran amenazados” por la gestión de Javier Milei y agregó: “Transitamos un grave momento como país y como sociedad. Un gobierno nacional que, en nombre de una mal entendida ´libertad de mercado´, implementa un ajuste brutal que sufren especialmente los sectores de menores ingresos, las clases medias asalariadas, jubilados y pensionados”.
De acuerdo a los dirigentes sindicales, “el ajuste no lo paga la casta; sino que recae sobre los sectores más vulnerables”. Para ejemplificar, desplegaron los siguientes datos: “el 31% de caída real en las partidas presupuestarias de jubilaciones y pensiones, el 87% en obras públicas, el 39% en subsidios al transporte, el 76% en transferencias a las provincias, 18% en recorte a las universidades y 13% en programas sociales”.
“En ese desafío convocamos y ponemos a consideración pública de todos los actores sociales e institucionales, la construcción de un programa de consenso multisectorial”, planteó la entidad gremial y concluyó: “Nadie por sí solo puede arrogarse cambiar la cultura de un pueblo que se construye y consolida a través de la historia, porque ese cambio pertenece al conjunto de la comunidad argentina”.
