Comenzó este jueves el paro nacional convocado por la CGT y las dos CTA en rechazo a la Ley Bases y la reforma laboral que impulsa el gobierno de Javier Milei. La medida de fuerza, además, tiene la adhesión de algunos gremios en nuestra provincia, entre ellos el gremio que agrupa a docentes, que es la Asociación de Maestros y Profesores (AMP).
En diálogo con La Red el secretario general de AMP, Rogelio de Leonardi, brindó un panorama a nivel nacional sobre las políticas que lleva adelante el gobierno de Milei, y expresó que: “no hay una comprensión acabada del daño que se está haciendo a los cimientos de la Constitución, de la Nación, del propio federalismo. No hay conciencia de la destrucción que se está haciendo de las esperanzas, de las expectativas de los trabajadores y del pueblo. Y esto nos va a costar remontar”.
En este sentido, explicó los puntos negativos de la Ley de Bases, como el aumento de edad jubilatoria a 65 años en las mujeres o la reforma laboral: “si esto se consolida, no van a existir los sindicatos, porque los sindicatos somos una forma de resistir. La organización que se dan los trabajadores debe ser respetada”, y agregó que: “son bases de destrucción de la nacionalidad, bases de la instauración de una colonia en Argentina”.
“Nunca nos ha ido tan mal. Nunca hemos llegado a tocar techo como estamos tocando de agravamiento sustantivo, donde es inconcebible pensar que no se pueda vivir con menos de un millón de pesos”, agregó, y sostuvo que: “nunca he visto que mis compañeros estén viviendo una situación de este tipo, que haya docentes que puedan decir que con este sueldo no llegan a los primeros 10 días del mes. Nunca pasó que con el aumento del combustible, mis compañeros trabajadores de la educación opten por no ir a trabajar cuando le queda a cierta distancia porque no les reditúa”.
Sobre las negociaciones de los salarios docentes, expresó que: “Son desesperanzadas. No hay financiamiento educativo, no se da la plata de nación, se ha suprimido el incentivo docente, se han suprimido partidas nacionales que venían para restaurar escuelas para la Copa de leche, para el comedor escolar”.