El gobierno nacional acordó ayer con las casas de altos estudios del interior del país un aumento del 270% para gastos de funcionamiento. Es el mismo porcentaje de incremento que se le dio a la UBA y que originó el fuerte reclamo del resto de las universidades del país.
Se convino asimismo trabajar de cara al presupuesto para el 2025, abrir una mesa de seguimiento de paritaria y financiar las obras que quedaron postergadas. “Está garantizado el segundo cuatrimestre”, se informó.
“El resultado fue muy positivo y está garantizado el segundo cuatrimestre”, informaron desde la Secretaría de Educación. Además, confirmaron que “hubo un entendimiento” sobre el cronograma de actualización de los presupuestos 2023 y 2024, como así también para crear una comisión entre la Subsecretaría de Políticas Universitarias y el comité ejecutivo del CIN para confeccionar el presupuesto 2025 de todo el sistema universitario.
También, desde la secretaria que dirige Torrendell prometieron avances para la infraestructura universitaria. “Se decidió darle prioridad a las obras que están por finalizar, con énfasis en la puesta a punto de aulas”.