Debido a la paralización de la obra que se registra en la provincia, la Cámara Riojana de la Construcción pasó de tener más de 3.000 trabajadores registrados en octubre 2023, a superar escasamente los 1.000 obreros en blanco según datos de marzo 2024. Así lo confirmó a Radio La Red el titular de la Cámara, Jorge Feryala.
“La información que teníamos la semana pasada era que Nación iba a firmar un convenio con la provincia, donde se encontraban tres tipos de situaciones diferentes”, indicó y detalló: “lo que se conoce como las grandes obras, que son las viales y algunas de saneamiento eran las que iban a seguir siendo financiadas por Nación; luego están las obras de arquitectura como escuelas y centros de integración, que Nación pretendía traspasar la responsabilidad a la provincia y que se haga cargo del financiamiento; el tercer grupo eran obras que se iban a rescindir”. “Las obras de vivienda no estaban en ninguno de estos tres grupos”, agregó.
A modo de ejemplo, nombró la obra del camino a Sanagasta, el camino a Chilecito, la obra del Chacho y una planta cloacal en Chepes, como las obras que hoy se encuentran paralizadas y que iban a ser reactivadas a partir de este convenio que finalmente no se firmó.
Este convenio quedó suspendido, pero aún no hay mayor información sobre si en la brevedad podrá concretarse.
“Hasta que no se firme el convenio Marco, las obras siguen paralizadas”, reiteró Feryala. En este contexto el panorama de las empresas constructoras en La Rioja “sigue siendo malo”. “Prácticamente las obras están paralizadas en su totalidad, salvo un grupo de obras de vivienda que la provincia dio continuidad con fondos propios, pero es un porcentaje muy chico, porque hay casi 1.400 viviendas paralizadas”, manifestó.
En este sentido, el titular de la Cámara de la Construcción informó que “en las medidas de las posibilidades económicas que tenga La Rioja, la idea del Gobernador es ir retomando todo tipo de obras”.
Lo cierto es que la caída interanual del empleo registrado es de casi el 60% de marzo 2024 a marzo 2023. Las empresas constructoras se están quedando con el personal mínimo, porque la incidencia fue muy negativa para el sector.