Después de la feria judicial que comienza en julio, la Cámara Tercera tiene en agenda para este viernes 26 el inicio del juicio por el homicidio de Zoe. Cabe recordar que por ese hecho se encuentran imputados la madre de la niña, Julieta Jimena Córdoba, y el pastor Andrés R. Bustamante.
Córdoba y Bustamante se encuentran acusados como coautores materiales del delito de “Homicidio Agravado por Alevosía y Criminis Causa”, y en el caso de la progenitora, también “agravado por el vínculo”, previstos en el artículo 80, inciso 1, 2 y 7 del Código Penal, de conformidad a lo dispuesto por los artículos 327, 328, 329 y 330 del Código procesal Penal.
En este marco, Radio La Red dialogó con el abuelo paterno de la menor, Oscar Rodríguez, quien se mostró movilizado por el inicio del juicio. “Mañana comienza una nueva etapa y tenemos fe en que se haga justicia. Vamos a seguir la lucha para que los acusados tengan su pena máxima”, expresó.
De acuerdo a los delitos de los que se acusan, podrían recibir una pena de hasta 25 años de prisión. “Por más que los acusados tengan cuatro abogados, vamos a luchar para que le den la pena máxima, más de 35 años”, planteó el abuelo.
Sin dudas el juicio será una etapa sumamente difícil. En este sentido, Rodríguez expresó: “La Dra. López nos dice que nos quedemos tranquilos, que todo está bien, pero hay muchas cosas que pueden pasar en el juicio. Nos venimos preparando desde hace meses, porque vamos a ver muchas cosas y revivir muchas cosas duras. Trataremos de ser fuertes y recordaremos a Zoe siempre de la mejor manera”.
Lo más triste del caso son las reiteradas oportunidades en que la familia paterna advirtió a la Justicia que la menor no debía estar al cuidado de la madre, pero nadie los escuchó y todo terminó con el peor final.
“Nosotros advertimos a la Justicia que la niña no quería irse con la madre, y esas pruebas y denuncias por maltrato existen y no tuvimos respuestas. Nunca pusieron atención de dónde podría estar Zoé mejor. Pueyrredón es el asesor de menores, es quien entrega a Zoe a su madre aún teniendo las pruebas”, relató el abuelo acusándolo además como provocativo.
Por último, recordó con evidente emoción: “Zoe se crió con nosotros. La madre la abandonó a los meses de nacer, se puso de novia y abandonó a mi hijo y a Zoe, por eso ella quedó con nosotros. No tomó teta, tomaba la mamadera, pero nunca se quejó, porque desconocía totalmente a la madre y a sus abuelos maternos, porque no la conocían”.