El juez federal Daniel Herrera Piedrabuena reveló la grave situación que enfrenta el sistema penitenciario en La Rioja debido a la sobrepoblación carcelaria y el aumento de casos de narcomenudeo. Según Piedrabuena, la falta de espacio en los centros de detención obligó a las autoridades a otorgar prisión domiciliaria a personas detenidas por delitos de drogas.
“En este momento, hay alrededor de 60 personas detenidas en la Alcaldía por consumo de drogas, y los centros de detención no dan abasto,” señaló el juez en diálogo con La Red. Además, explicó que, en algunos casos, las personas son puestas en arresto domiciliario mientras se completa su proceso judicial. Esto, agregó, representa un gran desafío para el sistema judicial y para las fuerzas de seguridad, que deben enfrentar una problemática que requiere de recursos económicos y de una infraestructura adecuada.
Las autoridades intensificaron los operativos antidrogas en las zonas de Capital y Chilecito. Estos operativos, realizados en colaboración con la Gendarmería, la Policía Provincial, la Brigada de Tóxicos y la Policía Federal, buscan desmantelar redes de microtráfico que, según Piedrabuena, tienden a reestructurarse rápidamente.
“El aumento del narcotráfico no se detiene, pero tampoco nuestras fuerzas de seguridad dejan de actuar, desarticulando constantemente estas bandas que se arman y desarman,” afirmó el juez. Estos operativos también son impulsados por denuncias anónimas, que permiten llevar adelante investigaciones más precisas para limitar el circuito de comercialización de estupefacientes.
El juez Piedrabuena destacó que el fenómeno del narcomenudeo se encuentra vinculado a factores económicos y sociales, que afectan principalmente a ciertos sectores de la población. “Es una cuestión muy social, la situación económica difícil lleva a que una franja de la sociedad sea utilizada para la comercialización de drogas,” explicó.
Para combatir esta problemática, se realizan diversas intervenciones en Chilecito, ciudad que en los últimos tiempos experimenta un aumento en la presencia de bandas locales dedicadas al tráfico de drogas. A través de la instalación de una Delegación de Narcotráfico de la Policía Provincial y la colaboración con un cuerpo especial de Gendarmería, las autoridades buscan limitar el alcance de estas redes.
Piedrabuena también enfatizó la necesidad de abrir diálogos y proponer estrategias integrales que ayuden a abordar el problema del consumo de drogas y a brindar apoyo a las familias afectadas. “Tenemos que ver cómo rescatar a las personas que salen del consumo y cómo asistir a las familias que se ven impactadas por esta problemática,” afirmó.
