El médico pediatra Salomón Dannon aseguró que en La Rioja solo la mitad de los niños y niñas tienen un peso saludable. En este sentido el pediatra indicó que la principal causa es la crisis económica sin embargo no descartó que el sedentarismo y el uso de las pantallas complican la situación.
Cabe destacar que según las estimaciones de la Federación Mundial de Obesidad para 2035 la obesidad infantil podría duplicarse en la próxima década. Las principales causas son el impacto del sedentarismo y el consumo de ultraprocesados.
Al respecto Dannon sostuvo que “hay una mala nutrición que implica un aumento en el sobrepeso y obesidad que está asociada a alimentos que son más baratos que son más fáciles de adquirir y que se asocian al poco tiempo que los padres tienen para cocinar como así también la imposibilidad que los chicos gasten energías, saliendo, estando en lugares al aire libre, corriendo, jugando”.
En tanto destacó que “en La Rioja solo la mitad de los niños tienen un peso saludable y el resto se reparte, en niños con bajo peso y la gran mayoría cercano a un 38% de los chicos tienen sobrepeso y obesidad”.
Además señaló que “la falta de la mesa familiar hace que la comida sea no es solo una comida para todos, se perdió compartir los alimentos. Hoy los niños desayunan una coca y un sandwuiches o galletas dulces y jugos en lugar de una leche, con pan o frutas”.
Es preciso resaltar que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ubicó a Argentina en el puesto 11 entre los países con más niños obesos menores de cinco años, mientras que la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por su sigla en inglés), la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y Unicef informaron una prevalencia de obesidad en menores de cinco años de 12,9%, la más alta de la región sur.
Estas cifras no sólo reflejan una crisis sanitaria en el presente, sino que auguran un futuro plagado de enfermedades crónicas, deterioro emocional y costos sociales crecientes.
Los datos son contundentes: según la Segunda Encuesta Nacional de Nutrición y Salud (ENNyS 2) de 2019, el 41,1% de los niños y adolescentes de entre 5 y 17 años ya presentaba sobrepeso u obesidad. Y ante este panorama, la Federación Mundial de Obesidad proyecta un incremento del 100% en la obesidad infantil para 2035, lo que implica un desafío inminente para las políticas públicas y el bienestar de las generaciones futuras.
Para 2030, se proyecta que el 5.7% de este grupo etario tendrá sobrepeso, casi el doble de la meta global del 3%.
En América Latina y el Caribe, el sobrepeso en los más chicos es mucho más alta que el promedio global, situándose en torno al 8,6% en 2022.
En lo que respecta a la prevalencia de sobrepeso en niños menores de 5 años en Argentina, la cifra para 2022 que arrojó la FAO indicó un aumento de 1,6 puntos porcentuales en la última década: del 11% en 2012 al 12,6% en 2022.
Frente a esos datos, el sobrepeso infantil en Argentina es alto en comparación con el promedio latinoamericano del 8,6%, el sudamericano del 9,7% y el promedio mundial del 5,6%.
Además. la FAO advierte que la región latinoamericana sufre un aumento continuo en las tasas de obesidad en adultos, alcanzando el 24% en 2022.