
El gobierno liderado por Javier Milei avanza con un proyecto de ley que propone derogar varias normativas vinculadas a lo que el Ejecutivo considera «discriminación positiva». La iniciativa, impulsada por la Secretaría de Planeamiento Estratégico, a cargo de María Ibarzabal Murphy, y el equipo del asesor presidencial Santiago Caputo, plantea eliminar la figura del femicidio del Código Penal, la Ley de Identidad de Género y el cupo laboral trans.
Bajo el título Igualdad ante la Ley, el proyecto busca, según fuentes oficiales, erradicar privilegios legales que «benefician a ciertos sectores en detrimento de otros». «El Estado no puede hacerse cargo de cada sector que se considere minoría», afirmó un funcionario con acceso directo al despacho presidencial.
El anuncio se produce en medio de una ofensiva discursiva del presidente Milei contra lo que calificó como «ideología woke» y «feminismo radical». La propuesta ha generado reacciones divididas: mientras algunos sectores celebran la medida como un paso hacia una igualdad sin distinciones, otros critican que desprotege a grupos históricamente vulnerables y perpetúa desigualdades estructurales.
La figura del femicidio, contemplada en el Código Penal, fue incorporada como agravante para crímenes de género, reconociendo la violencia específica contra las mujeres. Por su parte, la Ley de Identidad de Género y el cupo laboral trans han sido reconocidos internacionalmente como avances en materia de derechos humanos y equidad.
El proyecto, que todavía se encuentra en etapa de desarrollo, será presentado al Congreso en las próximas semanas, en lo que se anticipa como un debate que enfrentará fuertes tensiones entre oficialismo y oposición.