
El abogado de la familia de Samara Jorge, la nena de 4 años que falleció de un paro cardiorespiratorio en abril de 2012, 24 horas después de haberse tragado un carozo de aceituna y tras ser atendida en el hospital Vera Barros la mandaron de vuelta a su casa, confirmó que una de las médica absuelta en el juicio deberá enfrentar un nuevo enjuiciamiento. Se trata de Brenda Rivera que atendió en segunda instancia a la niña.
El abogado recordó que la niña murió consecuencia de una mala praxis. “Ella se encontraba en su casa comiendo aceitunas y tiene un episodio de atragantamiento con un carozo de aceituna, por lo cual, la madre instantáneamente acude al hospital Enrique Vera Barros a la guardia. Es atendida, en un primer momento, por la médica Felisa Luna y le indica que no pasaría a mayores que el carozo seguramente estaba en la vía digestiva y que lo iba a expulsar de forma natural y la envía nuevamente a la casa. La madre la notaba decaída y se queda en el hospital y atendida en una segunda oportunidad por la médica Brenda Rivera que, en idéntico sentido, minimizan la situación y les recomiendan que se vayan directamente a la casa”, comento. Posteriormente la niña mientras jugaba en un inflable en el centro de esta Capital se encontraba saltando y empieza a mover sus manos en un estado de desesperación. El carozo le obstruyó la vía respiratoria y produjo el deceso de la niña, dijo el abogado.
La médica Felisa Luna fue condenada, en el 2016, a dos años de prisión en suspenso y 5 años de inhabilitación y la segunda médica, Brenda Rivera, fue absuelta. Andrada explicó que en contra de esa absolución plantearon un recurso de casación que resulto favorable y revocó la absolución de Brenda Rivera y el Tribunal Superior. “En aquel momento, dispuso reenviar la causa a la Cámara Tercera para la realización de un nuevo juicio, únicamente ya en contra de Brenda Rivera. Esta fecha de juicio que va este a tener inicio en el mes de marzo de este año”.
Agregó además que durante el curso de la instrucción se pidió ayuda a la Policía Técnica Judicial de Córdoba que realizó una pericia que fue “contundente y da cuenta que el fallecimiento de la niña se podría haber evitado y que justamente se produjo por un mal abordaje desde el punto de vista médico”. “Evidentemente este un episodio de mala praxis médica. Luna se encuentra condenada con sentencia firme y consentida”, expresó.