El obispo Dante Braida celebró la misa de Pascuas en el Servicio Penitenciario Provincial. En la celebración participaron mas de 70 internos y miembros de la pastoral. «Fue una misa muy emotiva donde se les entregó a cada uno al finalizar un rosario y un devocionario de la Virgen. Además hubo un momento para compartir fraternalmente mate cocido y pan», informaron oficialmente.
En la homilía, el Obispo expresó que «Jesús resucitado viene a remover nuestras piedras de nuestro sepulcro de la indiferencia, el egoísmo»; y que hay que celebrar la Pascua «como una gran familia donde nadie es mas que nadie». «No existen los de afuera ni los de adentro. Somos todos una gran familia que nos necesitamos. Creer en la Resurrección es dejar que Jesús nos haga nuevas criaturas, vemos en María Magdalena a quien Jesús la liberó de muchos males y como es la primera enviada a anunciar a los Apóstoles la Resurrección».
«Jesús se sigue haciéndose presente en nuestras vidas. Ahí donde dos o tres estén reunidos en su nombre ahí está Él, por eso tenemos que hacer de este lugar donde se comparta la vida no un sepulcro, ni poner piedras de muerte», afirmó
