
Andrea Cruz, secretaria General del Sindicato de Amas de Casa de la República Argentina (SACRA) delegación La Rioja, expresó su profunda preocupación por la situación que atraviesan las trabajadoras de casas particulares, quienes desde enero no perciben ningún aumento salarial debido a la falta de acuerdos paritarios. “De 6.000 afiliadas hoy tenemos 3.000 trabajadoras registradas”.
“Para nosotros es un gran problema y un caos para las trabajadoras, porque desde enero no tenemos paritarias. Las compañeras han quedado estancadas, sin ningún tipo de actualización salarial”, señaló Cruz. La dirigente explicó que, si bien desde el SACRA continúan trabajando junto a la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para reactivar la negociación, las propuestas que llegan desde el gobierno nacional están lejos de satisfacer las necesidades del sector.
“El ofrecimiento de Nación es de apenas un 1% de aumento, en dos cuotas. Eso no alcanza ni para un kilo de pan. Nosotros no aceptamos ese 1%, estamos pidiendo un incremento mayor, pero hasta el momento Nación no nos habilita ese margen”, remarcó.
La situación no solo afecta los ingresos de las trabajadoras, sino que también repercute directamente en la cantidad de afiliadas al sindicato. Según detalló Cruz, actualmente en la provincia cuentan con unas 3.000 trabajadoras registradas, mientras que un año atrás la cifra superaba las 6.000. “Durante la gestión de este gobierno nacional hemos perdido una gran cantidad de afiliadas, tanto monotributistas sociales como trabajadoras de casas particulares”, explicó.
Además, recordó que el SACRA no solo representa a trabajadoras de casas particulares, sino que también acompaña a mujeres de diferentes ámbitos laborales dentro de las estructuras gubernamentales. “Nuestro objetivo es acompañar y contener a todas las trabajadoras en el sistema laboral”, concluyó.