Tras el caso de los flamencos encontrados sin vida en la zona de Laguna Brava, el secretario de Ambiente de la Provincia, Santiago Azulay, brindó detalles sobre la situación. Informó que responde a una migración temprana de las aves que encontraron el agua congelada en un 70 por ciento.
De esta manera, desmintió la denuncia de asambleas ambientales que habían denunciado que el hecho era producto de la contaminación en la zona. “Hasta la única ornitóloga de la Provincia, que es docente de la UNDEC, estuvo trabajando tomando muestra de suelo, de tejidos y de agua y todo el mundo se inclina a pensar que el factor climático, innegable, adelantó la migración temprana de los flamencos”, ratificó asegurando que todas las muetras dieron negativas.
A su vez agregó: “debo decir que las páginas virtuales de asambleas, que sin nombre ni apellido, y ninguna atadura a la identidad de las personas, se dan el lujo de mentir libremente y generar zozobra en la sociedad, y deben generarnos un alerta”. “Ellos hacen entrar a toda una provincia en una situación de zozobra”, indicó.
“Seguramente las fotografías son estremecedoras pero se trata de solamente diez flamencos muertos, de 590 que pudimos avistar en esta época que comienzan a llegar, sobre una población total de 3.500 flamencos, en temporada alta”, consideró.
Y explicó que, al llegar de forma temprana a la Laguna Brava, encontraron aguas congeladas por la época del año, “y entonces los flamencos, que tiene un gran estrés y un gran sacrificio físico, muchos mueren antes, durante y después de la migración”.
“El poco volumen de agua que había por estar congelada, significaba a su vez, poco alimento para los flamencos”, agregó.
“Es la Ley de la naturaleza, el más fuerte prevalece, y los más débiles van pereciendo”, aclaró.
Comentó en tanto que las muestras se tomaron en conjunto con SENASA y apenas tengan el informe, podrán contar con pruebas científicas a la sociedad sobre cuál fue el motivo de la muerte de la decena de aves y de ese modo evitar que la situación se replique.