
En una reciente entrevista con Jonatan Viale en el programa Pan y Circo de Radio Rivadavia, el ex candidato a presidente de Boca Juniors, Andrés Ibarra, no escatimó en críticas hacia la gestión actual del club bajo el liderazgo de Juan Román Riquelme. Según Ibarra, hay un alarmante 70% de desaprobación entre los hinchas sobre la administración del ídolo boquense.
Ibarra argumentó que Boca atraviesa una «crisis de liderazgo», caracterizada por una «falta de conducción, planificación e improvisación», lo que ha llevado a una serie de fracasos deportivos y a una inestabilidad en el cuerpo técnico, que ha experimentado constantes cambios. La situación se agrava con la mala gestión económica del club; Ibarra reveló que Boca ha perdido entre 20 y 30 millones de dólares debido a negociaciones mal manejadas, destacando la salida sin compensaciones adecuadas de jugadores clave como Mac Allister, Molina, Pavón, Izquierdoz, Retegui, Rossi y Valentini.
El ex dirigente también criticó el manejo interno del club, sugiriendo que Riquelme debería dejar de lado su ego personal y enfocarse más en el bienestar institucional. «Se rodeó de un Consejo de Fútbol que le dice todo que sí», comentó Ibarra, añadiendo que los técnicos no tienen libertad para elegir jugadores, lo que ha generado desconfianza tanto entre los hinchas como entre los propios futbolistas.
En relación a las elecciones del club, Ibarra denunció irregularidades en el padrón electoral, afirmando haber descubierto 13.000 socios mal incorporados justo antes de la votación. Respondiendo a acusaciones sobre intentos de suspender las elecciones por parte de su sector, Ibarra subrayó que el verdadero problema radicaba en un mal armado del padrón que afectó la transparencia del proceso electoral. Reconoció también que no realizaron una campaña comunicacional efectiva para conectar con los socios.
Mirando hacia el futuro, Ibarra dejó claro su deseo de regresar a la política del club con su movimiento «Pasión y Gestión» para buscar una revancha en las elecciones de 2027. En caso de ganar, su candidato preferido para dirigir al equipo sería Martín Palermo. A pesar de su disposición a colaborar con Boca, estableció una condición: «Si me llaman para colaborar por Boca, estoy dispuesto, pero no con esta dirigencia».
Finalmente, se refirió a su relación con la política nacional, destacando que Mauricio Macri sigue activo dentro del PRO y se está moviendo para generar consensos con miras a posibles alianzas con La Libertad Avanza. La situación actual del club y sus ambiciones políticas marcan un momento crucial en la historia reciente de Boca Juniors.
Fuente: NA