
El personal de salud del Hospital de Chilecito continúa en estado de protesta por falta de insumos, maltrato laboral y distribución irregular de guardias. En este marco, la Asociación de Profesionales de la Salud de La Rioja (APROSLaR) decretó una serie de paros escalonados que comenzarán este miércoles y se extenderán hasta el 10 de abril.
Claudia Contreras, secretaria general de APROSLaR, explicó que se mantuvieron reuniones con el Ministerio de Salud y las autoridades del hospital para tratar de encontrar soluciones. “Hace mucho tiempo venimos visibilizando las irregularidades en la distribución de guardias y el maltrato al personal, lo que generó un gran malestar”, afirmó.
Uno de los principales reclamos del sector es la renuncia de la directora de enfermería, la jefa de personal y la jefa de servicio general. Según Contreras, estos pedidos se fundamentan en denuncias sobre el manejo arbitrario de las guardias y el trato hacia los trabajadores. El Ministerio de Salud pidió 48 horas para evaluar la situación, y el viernes pasado manifestaron la necesidad de investigar los hechos denunciados antes de tomar medidas.
Cronograma de paros y estado de asamblea permanente
El personal de salud decidió avanzar con medidas de fuerza debido a la falta de respuestas concretas. El cronograma de paros es el siguiente:
- Miércoles 19 de marzo: Paro de 24 horas.
- Viernes 28 de marzo: Paro de 24 horas.
- Miércoles 3 y jueves 4 de abril: Paro de 48 horas.
- Lunes 8, martes 9 y miércoles 10 de abril: Paro de 72 horas.
Además, los trabajadores se mantendrán en estado de asamblea permanente durante la mañana y la tarde.
Uno de los puntos críticos del conflicto es la distribución de guardias. “Hay compañeros en áreas donde las guardias son necesarias y no se asignan, mientras que en otros sectores donde no se requieren tanto, sí se distribuyen”, denunció Contreras.
La secretaria general de APROSLaR también señaló que la baja de los salarios es un factor que agrava la situación. “Si los sueldos fueran suficientes para llegar a fin de mes, las guardias no serían la moneda de cambio. Hoy, todo el mundo quiere hacer guardias para completar su salario”, remarcó.