Escribe: Valentina Urus
Assay es una joven riojana que hace apenas unos meses que viene arrasando en las plataformas de Instagram, Tik Tok y sobre todo Twitch. Su crecimiento se debe a su carisma y constantes esfuerzos. En diálogo con La Red, Assay reflexionó sobre la labor streamer y los altibajos que hay que sortear para llegar al crecimiento.
Con el advenimiento de las redes sociales y las nuevas formas de conectarse mediante diversas plataformas, ya no es una sorpresa que la mayoría de las actividades que se realicen en la vida cotidiana estén mediadas por una computadora o un teléfono celular: así es el caso de Twitch, un sitio de live streaming para emitir videos en vivo y en directo durante un tiempo indeterminado y poder interactuar de forma más profunda con los usuarios.
Twitch está ganando tal fama que se la considera la red social de entretenimiento del futuro. Y es que las herramientas que brinda, tanto para creadores de contenido como para los usuarios es tan amplia que permite generar ingresos para los primeros al recibir donaciones, suscripciones o publicitando diferentes marcas mientras brindan su entretenimiento, y gran acompañamiento para los segundos, quienes como audiencia buscan una mayor conexión con su streamer favorito.
“En cinco prendemos en Twitch”: el caso de Assay en nuestra provincia.
Laura Cruz, más conocida por su nombre artístico, Assay, es una joven riojana que hace apenas tres años viene creciendo en Instagram y Tik Tok pero fue con Twitch que encontró y afianzó su comunidad de usuarios. Actualmente considera el trabajo en redes como su profesión y forma de generar ingresos como cualquier trabajo convencional, lo que debe sortear un estigma que viene de las personas mayores al no entender estas nuevas formas de salir al mercado laboral. “Hoy puedo decir que es mi trabajo principal y que trabajo con las tres plataformas. Es difícil de explicar a las otras personas que hay trabajos no convencionales y que también requieren esfuerzos. Para generar ganancias o crecer en redes se dedica mucho tiempo e inversión. Ni hablar de la edición de los videos o fotos que uno sube para intentar llegar a la gente. Yo ya siento un compromiso con mi comunidad que está del otro lado queriéndome ver o que me dice que le alegro el día. Es como una motivación, quizás un día ando mal de la garganta o media bajón y digo -no tengo muchas ganas de prender pero lo voy a hacer para cambiarme el ánimo y el del otro”, dijo a La Red.
La esencia misma de Twitch es el entretenimiento y acompañamiento por un rato largo: jóvenes que mientras estudian, trabajan o realizan sus quehaceres domésticos tienen de fondo a su streamer favorito como forma de acompañamiento y diversión. Chicos que pueden dejar comentarios opinando y debatiendo sobre diferentes asuntos con el creador de contenido. Gamers que se divierten viendo cómo otros juegan para poder irlos aconsejando y recomendando opciones dentro del juego.
La plataforma como tal, brinda un abanico de posibilidades para romper las distancias y que se forje una verdadera comunidad digital: “Yo estoy muy orgullosa de mi comunidad, por más que no sea la más grande. Es muy sana. Lo veo en la calle y en la virtualidad. Es siempre todo con respeto y son muy compañeros, me ayudan un montón. Siento que en Twitch termine de conectar con la gente después de todo lo que vengo recogiendo en Instagram o Tik Tok. Se crea una relación, no solo es entretenimiento, sino también que hay días que genuinamente nos acompañamos, empezamos a hablar de nuestros amores fallidos entre todos, nos deshagamos. Es muy lindo.” reflexionó la streamer.
Assay ha crecido de tal modo que incluso tiene espectadores de otras provincias y países, a los cuales sorprende mucho con su acento riojano: “Mi acento riojano es muy llamativo para el resto del país o incluso para gente de otros países. Es muy gracioso interactuar con ese público, les parece curioso y es muy lindo ver esas diferencias culturales. También me han llegado comentarios sugiriendo que trate de hacer un acento más neutral para que me entiendan más pero la verdad que no, es mi esencia, no voy a poder estar tantas horas sin marcar mi acento”.
Los streams de Assay se caracterizan por los gameplays y las interacciones simples con su público, en donde en cada vivo las cosas irán saliendo espontáneamente a medida que la joven empieza a interactuar con su comunidad: “Aunque intente planear los streams siento que termino haciendo lo que yo quiero en el momento o lo que van comentando en el chat. Me trato de acoplar a lo que todos queremos” dijo para La Red.
“Me gusta mucho el chisme, y a ellos también” agrega entre risas la streamer “Cuando les digo -no saben lo que me pasó hoy- siento que es mi momento de brillar. Empezás a ver tu vida de una forma más divertida porque si te pasa algo ya estás pensando en querer contarlo y compartir esa simpleza de la anécdota. Es poder charlar y conectar con los otros a la hora de chismosear, como decimos los riojanos”.
En cuanto al sexismo que se vivencia en las redes sociales y especialmente en los ámbitos gamers y de las exposiciones mediáticas, Assay considera que entró al mundo del stream en un momento en donde el machismo y el sexismo dejó de ser tan vigente. Hay juegos en donde predominan las mujeres y ya no se toleran comentarios discriminatorios en cuanto a las gamers. No obstante, siempre se puede educar y hablar de estos temas con la misma comunidad que uno forja a través de las plataformas.
“Intento de alguna forma educar a mi comunidad, contar experiencias de machismo en otros ámbitos y dejar en claro que no me gustan esas cosas. Justamente en stream se puede armar la comunidad que uno quiere y educar a los que visitan tu canal. A mi no me gusta ni que me boludeen por ser mujer ni que me valoren por mi género, y si hay algún comentario raro voy a explicar de la mejor manera mi punto de vista” reflexionó Assay.
Para iniciar en este mundo digital, lo que recomienda la joven stremear es comenzar desde ya, con lo que se tiene y poder divertirse en el proceso: “Yo tenía ese error en la cabeza de que debía conseguir la mejor computadora del mundo, y la verdad es que no, puedes ir empezando con lo que tenés, de a poco y paciencia. Si es algo que te gusta, seguro te va a dar los frutos. Sentirse cómodo y divertirse es la clave para que todo salga bien”.