A fines de mayo de 2015, el asesinato de Chiara Pérez, una adolescente de 14 años en manos de su novio Manuel Mansilla terminó de darle forma definitiva al hartazgo, a la bronca y al dolor por las víctimas de femicidio. “Nos están matando”, escribió en su Twitter la periodista Marcela Ojeda quien junto a otras trabajadoras de prensa fueron las que dieron origen y forma a aquella inolvidable marcha multitudinaria contra la violencia machista: Ni Una Menos.
EL 3 de junio de 2015, las calles de todo el país se colmaron de proclamas. Fue un punto de encuentro de víctimas de violencia de género que por primera vez y en compañía de otras mujeres no sólo se identificaban como tales sino que también descubrían que no eran las únicas.
En este sentido, Carolina Goycochea, referente del colectivo Ni Una Menos de La Rioja indicó que "ayer tuvimos una jornada larga si bien no estuvimos en la plaza realizamos 10 vivos de media hora desde la página y después de escuchar todos los testimonios y lo que se habló hicimos un balance en cuanto a medidas y políticas públicas, si bien se crearon ministerios, tribunales pero a la hora de poder sacar conclusiones de esas implememtaciones nos quedamos cortos en el presupuesto", sostuvo en La Mañana de La Red.
Siguiendo esta línea explicó que "tenemos legislaciones que podrían funcionar pero no se da así y resoluciones de justicia que sólo se quedan en la teoría, se quedó en el cartel de la propaganda electoral, muchos de los funcionarios que levantaban los carteles eran luego quienes ejercían violencia de género o estaban a favor de los agresores".
Además remarcó que "debemos pasar de la propaganda política a los hechos reales, las mujeres reclamamos que debe haber un presupuesto y esto se da en todo el país. Tenemos una ley que es un protocolo para el sistema escolar cuando un alumno expresa la violencia en el ámbito educativo pero tampoco se implementa".
Asimismo aseguró que "por lo general el personal de las distintas áreas trabaja y no llega a cubrir todo, la línea 144 es un instrumento valioso pero quienes atienden también son precarizadas y no dan abasto, aparte en la pandemia los números y estadísticas han crecido exponencialmente", afirmó.
Por último destacó que "es importante el actuar de los medios de comunicación para visualizar esto. No podemos reemplazar al Estado porque no lo somos pero se deben garantizar estos derechos", concluyó.