La locutora y actriz de doblaje riojana interpreta a dos personajes en la nueva serie Rosarito y sus Pizarras Mágicas, que se estrena este domingo en la emisora infantil Pakapaka y que se produjo en la provincia de La Rioja.
Este domingo se estrena en Pakapaka “Rosarito y sus pizarras mágicas”. Se trata de la primera serie animada realizada en La Rioja y narra parte de la infancia de Rosario Vera Peñaloza en su pueblo Atiles, buscando reivindicar a la figura de la maestra de la patria como mujer trabajadora, pionera y creadora de la educación argentina.
La serie se produjo en La Rioja y contó con un fuerte componente federal en su producción. Contó con veintitrés realizadores de diferentes localidades de La Rioja, Córdoba y Buenos Aires y, además, actores y actrices de doblaje que le pusieron vida a esos personajes entrañables.
Una de las voces riojanas del proyecto que llegó a la emisora Pakapaka y recorrerá el país junto a Rosarito y sus amigos es Carolina Ibáñez, locutora y actriz de doblaje. En diálogo con La Red La Rioja, comentó acerca de la experiencia y lo que significó para su carrera.
Una voz, dos personajes: El desafío de Carolina
Una vez que el producto y los personajes estaban definidos, comenzó el casting para determinar qué voces le pondrían alma a los personajes que conforman la historia. A partir de los casting se realizan diferentes pruebas de animación, características y formas de hacer las voces de los actores y actrices de doblaje para descubrir cuáles son sus movimientos a través de las voces, formas de hablar y gestos y a partir de ahí, los realizadores moldean esos personajes animados: “Fue la primera serie animada en La Rioja y fuimos descubriendo sobre la marcha”, comentó Ibañez.
“Cuando me llega un mail para participar y probar las voces, no tomaba dimensión de lo que se venía. Para mí era un casting más y esperar. De hecho cuando lo hice estaba pasando un momento de salud y lo hice igual, con la voz rota y con todo lo que implica estar mal de salud. Dije que lo iba a hacer y nada me detendría. Empecé a probar las voces y quedé”, narró Carolina.
La actriz interpreta a dos personajes en la historia: Efraín, un niño de seis años, y Flordelina, una anciana de 85 años. El desafío de caracterizar y dar vida a ambos personajes resultó ser todo un reto para la artista. “La forma de interpretar a ambos personajes era muy diferente. Tenían edades distintas: el niño era enérgico y la señora era más sabia. Fue un trabajo que demandó muchas horas y una gran responsabilidad”, compartió Ibáñez.
El camino hacía la federalización
Este proyecto representó un gran desafío y evidencia el camino hacia la federalización de los contenidos audiovisuales y las producciones animadas: “Especialmente para aquellos que trabajamos desde lugares remotos de nuestro país en este tipo de producciones, desde lugares en los que antes no existían oportunidades similares”, comentó la actriz, y agregó: “Ahora, nuestras voces están en Pakapaka, y podremos viajar a todos los hogares de niños y niñas en todo el país”.
A través del personaje de Efraín, la locutora revivió su propia infancia y se conectó con la niña que solía ser, transmitiendo emociones auténticas a través de su interpretación: “Era como una niña con juguete nuevo”, dijo.
“Ahora, nuestras voces están en Pakapaka, y podremos viajar a todos los hogares de niños y niñas en todo el país”, dijo Carolina.
“Se trabajó muchísimo para lograr este producto que trasciende un montón de cosas al ser la primera serie animada y riojana que habla de una mujer como Rosario Vera Peñaloza en su infancia”, concluyó Carolina.