Oros nombres y otros partidos políticos gobernarán en el 45% de los municipios de la provincia de Buenos Aires. El cambio de mando tiene como protagonista principal a Cambiemos, que le arrebató 45 distritos a otras fuerzas, y 37 de ellos al Frente para la Victoria. El kirchnerismo perdió, en total, el control de 41 municipios en territorio bonaerense.
Si bien buena parte del impacto de la elección en la provincia tuvo que ver con la salida de intendentes históricos en bastiones peronistas del conurbano, también fueron muchos los casos de ciudades importantes del interior provincial que dieron un golpe de timón y tendrán un jefe comunal de otra fuerza política.
De los 61 distritos que cambiarán de signo político, 45 pasarán a ser gobernados por Cambiemos. La alianza que postula a Mauricio Macri como presidente logró un gran avance distrital, que sustentó la victoria de María Eugenia Vidal, quien se quedó con la gobernación bonaerense al vencer al oficialismo, que postulaba al jefe de Gabinete, Aníbal Fernández.
En 37 municipios que gobernaba el kirchnerismo, se impuso un candidato de Cambiemos. En ese grupo aparecen casos destacables como La Plata, Lanús, Morón, Tres de Febrero, Quilmes o Pilar, y también distritos importantes, como General Pueyrredón (con cabecera en Mar del Plata) y Olavarría.
Fueron resonantes las victorias del chef Martiniano Molina sobre Francisco "Barba" Gutiérrez, en Quilmes; y la del periodista e historiador Diego Valenzuela, en Tres de Febrero, sobre el histórico jefe comunal Hugo Curto. Gutiérrez buscaba su tercer mandato consecutivo en Quilmes. Curto aspiraba a seguir en el poder después de 24 años de gobierno sin interrupciones en Tres de Febrero.
Cambiemos también le arrebató poder a UNA en territorio bonaerense. Se quedó con siete municipios que gobernaba el massismo. Bahía Blanca y Junín son los dos distritos más importantes que la fuerza de Sergio Massa cedió ante la de Macri. En Bahía Blanca, se impuso Héctor Gay; en Junín, Pablo Petrecca desbancó al intendente Mario Meoni. La fuerza macrista también sumó una intendencia que manejaba un partido vecinal, la de Coronel Rosales, en el sudoeste bonaerense.
El balance de Cambiemos es claro. Ostentará 45 nuevos gobiernos municipales, mientras que perdió el control de sólo siete de las intendencias que gobernaba con algún integrante de la alianza multipartidaria.
El kirchnerismo manejará nueve intendencias que no tenía, pero se le esfumaron 41 en las elecciones del domingo. Cambiemos le birló 37, y UNA, cuatro. El FPV sumó distritos importantes en el conurbano, como Hurlingham y Malvinas Argentinas. En ambos, le ganó al massismo.
Juan Zabaleta, secretario administrativo de Amado Boudou en el Senado y concejal en Hurlingham, ocupará la intendencia que ostentaba Luis Acuña desde 2001. Leonardo Nardini, jefe de la Anses en Malvinas Argentinas, desplazó del poder local a Jesús Cariglino, otro histórico jefe comunal, que quería llegar a su sexto mandato consecutivo.
El hermano de "Wado"
En Mercedes, el cambio de manos dejó al frente de la intendencia al camporista Juan Ignacio Ustarroz (hermano de crianza de Eduardo "Wado" De Pedro). Como en Hurlingham y en Malvinas Argentinas, en Mercedes también UNA cedió el poder. El FPV se quedó también con cinco municipios que manejaba Cambiemos con dirigentes que hoy conforman la alianza entre Pro, la UCR y la CC-ARI.
Para el massismo, el saldo de los comicios fue negativo. Sumó cinco nuevos gobiernos municipales en el interior bonaerense, pero cedió el control de diez comunas que dominaba, algunas de ellas en el conurbano.
En Chivilcoy, Las Heras, Monte y Necochea se quedó con intendencias que eran kirchneristas. La victoria de Guillermo Britos sobre Darío Speranza en el pago chico de Florencio Randazzo fue de las más importantes que cosechó UNA. En Chascomús, Javier Gastón se alzó con un triunfo en un municipio que gobernaba Cambiemos con el intendente radical Juan Gobbi.
Fuerte crítica de Landaua Lorenzetti
"El Poder Judicial está para dirimir controversias. Los que sabemos de elecciones somos nosotros", dijo ayer el diputado y apoderado del Partido Justicialista, Jorge Landau, en una fuerte crítica al presidente de la Corte, Ricardo Lorenzetti, y a la Cámara Nacional Electoral.
Landau se refirió al debate sobre el régimen electoral y dijo que la discusión política debe darse en el Congreso. "Está muy bien lo que quiere hacer Lorenzetti, pero, que yo sepa, el Poder Judicial está para dirimir controversias y el Poder Legislativo está para hacer las leyes". Y agregó: "¿Qué elección protagonizó Lorenzetti? ¿Qué elección protagonizaron los jueces de la Cámara Electoral?".
Fuente: La Naciòn