
La ciudad chubutense de Comodoro Rivadavia, una de las más pobladas de la Patagonia, enfrentó este sábado una situación crítica tras un intenso temporal que dejó a varios barrios anegados y provocó importantes daños en infraestructura. Las fuertes lluvias, acompañadas de vientos con ráfagas de hasta 60 kilómetros por hora, generaron un escenario de caos en distintas zonas de la ciudad.
Barrios inundados y daños en el hospital regional
Entre las áreas más afectadas se encuentran los barrios San Cayetano y Moure, donde las calles quedaron completamente inundadas, dificultando el tránsito y afectando a numerosas viviendas. El temporal también impactó en el Hospital Regional de Comodoro Rivadavia, donde varios sectores resultaron dañados, complicando la atención médica en medio de la emergencia.
Según informaron las autoridades, en solo 45 minutos cayeron más de 12 milímetros de agua, una cantidad inusual para la región que superó la capacidad de drenaje de la ciudad. Este fenómeno climático extremo generó corrientes de agua que arrastraron decenas de vehículos, los cuales quedaron apilados en distintos puntos de la ciudad.
Suspensión del transporte público y medidas de emergencia
Ante la gravedad de la situación, la municipalidad decidió suspender el servicio de transporte público en varias zonas afectadas, con el objetivo de evitar mayores riesgos para los ciudadanos. Las ráfagas de viento, que alcanzaron los 60 km/h, agravaron el escenario, provocando voladuras de techos y caída de árboles en algunos sectores.
Las autoridades locales trabajaron en la asistencia a los vecinos afectados y en la evaluación de los daños materiales. Además, se recomendó a la población evitar circular por las calles inundadas y tomar precauciones ante la posibilidad de nuevos fenómenos climáticos adversos.
Impacto en la comunidad
El temporal no solo dejó un panorama desolador en las calles de Comodoro Rivadavia, sino que también generó preocupación entre los habitantes, quienes enfrentaron dificultades para trasladarse y proteger sus bienes. La acumulación de agua en zonas bajas y la falta de un sistema de drenaje eficiente agravaron la situación, exponiendo una vez más la vulnerabilidad de la ciudad ante eventos climáticos extremos.
Mientras las autoridades continúan evaluando los daños y trabajando en la recuperación de las zonas afectadas, la comunidad se organiza para ayudar a quienes más lo necesitan. Este episodio sirve como recordatorio de la importancia de fortalecer la infraestructura urbana y los sistemas de prevención ante fenómenos climáticos cada vez más frecuentes e intensos.