Con la presencia de la embajadora israelí Dorit Shavit, el ministro israelí de Agricultura Yair Shamir y el jefe de Gabinete Aníbal Fernández liderando la comitiva oficial, la Embajada de Israel en Buenos Aires recordó el 23° aniversario del atentado a su sede de Suipacha y Arroyo en 1992. Bajo los lemas "A 23 años de la llegada del terrorismo a la Argentina" y "El terrorismo nos mata un poco a todos", el acto convocó a familiares de las 22 víctimas del atentado, sobrevivientes, miembros de los gabinetes nacional y porteño, además de legisladores, diplomáticos y representantes de la comunidad judía.
Este año, la convocatoria -48 horas después del aniversario por superponerse con los comicios en Israel- estuvo precedida por una sucesión de eventos que le dieron un tinte especial: la denuncia y posterior muerte del fiscal Alberto Nisman, el discurso de la presidente Cristina Kirchner en la apertura de sesiones ordinarias del Congreso sugiriendo que Israel no reclama justicia por el atentado a la embajada como lo hacía con el de la AMIA, la polémica con presidente de la Corte Suprema de Justicia Ricardo Lorenzetti en torno si hubo o no sentencia en la causa, la declinación de la mandataria a participar argumentando cuestiones de agenda luego de que fuera invitada como oradora por la embajadora y la apertura de los archivos de inteligencia sobre los atentados.
Como ya es tradición, se hizo un minuto de silencio a las 14.47 sonó una sirena recordando la hora exacta del atentado. Tras la lectura de los nombres de las víctimas, comenzaron los discursos, que estuvieron a cargo de Jorge Salvador Cohen, sobreviviente del atentado, del ministro Shamir y de la embajadora Shavit.
En una intervención cargada de emoción, Cohen dijo que "la impunidad y el dolor en los ataques se modelaron juntos, como una sola roca, como un monstruo, como un viento de fuego sobre los ojos de un niño".
El ministro Shamir apuntó contra Irán y Hezbollah por los atentados de la Embajada y la AMIA, y desató los aplausos de los presentes cuando afirmó que Nisman "pagó con su vida el intento de llegar a la verdad". "El mundo asume una actitud que o es hipócrita o claramente hace caso omiso del hecho de que ese poderío se dirige contra el mundo civilizado, agregó.
"Israel y Argentina comparten el dolor que dejó una herida abierta en el corazón de ambas sociedades. Lamentablemente, a pesar del tiempo transcurrido, nadie fue sometido a juicio", afirmó Shavit y agregó que "el Estado de Israel asigna suma importancia a la continuación de la investigación del atentado hasta someter a juicio a los perpetradores".
Tanto antes como después de los discursos, Fernández ofició de vocero del Gobierno ante los medios mientras el vicecanciller Eduardo Zuaín y el ministro de Justicia Julio Alak eludieron las cámaras. "Hemos venido a reconocer que es algo que nos importa mucho", sostuvo el jefe de Gabinete.
Por el Gobierno porteño, estuvieron el jefe de Gabinete Horacio Rodríguez Larreta y el ministro de Turismo y Cultura Hernán Lombardi, mientras que en el escenario también estuvieron Jorge Telerman -presidente del Instituto Cultural de la Provincia de Buenos Aires y jefe de campaña de Daniel Scioli- y el senador radical y precandidato presidencial Ernesto Sanz.
Fuente: Infobae