
El Concejal Pablo Herrera brindó detalles sobre la reciente reunión de la Comisión de Presupuesto y Hacienda del Concejo Deliberante, que tuvo como objetivo principal clarificar el funcionamiento del área de Rentas Municipal. La convocatoria ampliada, a la que asistieron casi todos los concejales, buscó desmentir denuncias mediáticas que vinculaban un reclamo laboral con supuestas vulnerabilidades en el sistema tributario.
Herrera fue enfático al afirmar que el sistema de Rentas es robusto e inalterable, y que la información tributaria tiene una «trazabilidad» que impide manipulaciones. Explicó, en Radio La Red La Rioja, que el origen de la polémica fue un reclamo de índole laboral de un exfuncionario, que fue rechazado por la justicia por no agotar las instancias administrativas.
«Nosotros ninguna pero se había hecho una denuncia mediática a través de un reclamo laboral y se mezclaba todo», señaló Herrera, agregando: «Queríamos sacar de cuajo las dudas porque es un tema muy delicado la cuestión tributaria y la Municipalidad se nutre de las tasas y contribuciones que aporta la ciudadanía y no queríamos que eso estén tela de juicio».
Más allá de la controversia, la reunión sirvió para confirmar una mejora en la recaudación municipal. Herrera detalló que, desde enero del año pasado hasta la fecha, se registró un «considerable incremento» en los ingresos por tasas y contribuciones. Esta mejora se atribuye a modificaciones en las Unidades Tributarias Municipales (UTM), la incorporación de nuevos contribuyentes como entidades financieras y un aumento en la recaudación del impuesto inmobiliario y a los rodados. El concejal puntualizó: «Lo que sí está sucediendo es que se está, digamos, se está contando con información más veraz de los contribuyentes».
El concejal destacó el trabajo en la ampliación de la base contributiva, que al inicio de la gestión contaba con 30.000 frentistas y se busca equiparar con los 90.000 registrados por Catastro provincial y otras áreas. Para lograrlo, explicó que se están realizando relevamientos mediante herramientas tecnológicas como Google Maps y visitas a barrios para detectar construcciones y ampliaciones no declaradas.
Herrera aclaró que la carga de estas novedades se hace en Catastro y que cualquier modificación en los valores «siempre es en más», salvo casos excepcionales de demoliciones o particiones judiciales. En este sentido, Herrera aseguró que «no es que una persona pueda pagar menos por su inmueble, o le puedo hacer figurar menos metros cuadrados, eso es imposible».
Finalmente, Herrera adelantó que se está trabajando en la creación de un Banco de Tierra Municipal. Este proyecto, inspirado en una experiencia exitosa en el municipio de Dolores, Buenos Aires, busca generar recursos a través de la venta de terrenos municipales con todos los servicios. Según el concejal, los fondos obtenidos se destinarían «la mitad a la infraestructura de esos loteos y la otra mitad para la compra de nuevos lotes para generar, digamos, de vuelta el lote con servicios para la venta», creando un ciclo virtuoso de desarrollo y servicios para la comunidad.