Desde el Cucailar destacaron la importancia de la sanción de la Ley Justina por parte del Congreso nacional. "La ley Justina viene en alusión a una nena de 12 años que falleció esperando un corazón.
"Es una modificación de la ley que ya tenemos del donante presunto, ahora la ley libera a las familias de tomar una decisión, ahora es el individuo quien dirá expresamente que no es donante", dijo Carlos Reinoso.
"Actualmente más de 250 personas están esperando un transplante, la mayoría son renales y luego pacientes de corneas, luego de hígado", destacó el funcionario provincial en La Tarde de La Red.
Esta nueva ley modificará la legislación actual sobre donación de órganos sancionada en 2005, la cual estableció la figura del "donante presunto". Aquella norma, si bien establecía que toda persona mayor de edad es donante de órganos, a su muerte la última palabra la tenían los familiares.