El Gobierno nacional a través del Decreto 965/2020, decidió aplazar la suba de los impuestos a los combustibles que estaba pautada para el primero de diciembre. La normativa publicada en el Boletín Oficial dispone que el incremento se establezca a partir del 16 de diciembre inclusive, suspendiéndose toda otra actualización hasta el 15 de enero de 2021.
El impuesto a los combustibles plantea un ajuste que se realiza de manera trimestral. Si bien el primero de diciembre tendría que haberse dado un aumento correspondiente al tercer trimestre de este año, también había quedado pendiente desde septiembre una parte de la suba correspondiente al segundo trimestre.
La medida determinada en el Decreto Nacional buscó prorrogar hasta mediados de diciembre el porcentaje de incremento del segundo trimestre y deja pendiente el que corresponde al tercer trimestre para enero.
La actualización trimestral de los tributos correspondientes al segundo trimestre debería ser de un 5,2%, mientras que los indicadores inflacionarios para la suba que debe darse en el tercer trimestre se ubican en un 7,4%. Es decir que los impuestos deberían actualizarse en un 12,6% pasado el 15 de enero.
“Si analizamos la incidencia del incremento en los impuestos, el 5,4% en diciembre representa en el caso de la nafta una suba de 83 centavos y en el gasoil un alza de 55 centavos, lo que representa un aumento en surtidor del 1,3 y del 1% respectivamente”, explica el consultor Cristian Bergmann.
No obstante y según lo que se comenta en el mercado -no está confirmado de manera oficial – es altamente probable es que las empresas petroleras generen un ajuste para los consumidores a partir del 16 de diciembre, por un lado para actualizar los montos de impuesto y por otro para recomponer su rentabilidad, en el orden del 3 al 4%.