Este lunes, a través del Boletín Oficial, se conoció la medida del gobierno nacional que elimina los precios máximos para las garrafas del Programa Hogar. La decisión generó un fuerte debate y preocupación, especialmente entre los sectores más vulnerables.
La medida, impulsada por la Secretaría de Energía apunta a desregular el mercado del Gas Licuado de Petróleo (GLP), en línea con la política de libre mercado que promueve el gobierno de Javier Milei.
La normativa establece que, para liberar el sistema de regulaciones de precios, se dejarán de aplicar los “Precios Máximos de Referencia” en las etapas de fraccionamiento, distribución y venta al público de las garrafas. En su lugar, se implementarán “Precios de Referencia” sin un tope máximo, lo que permitirá ajustarlos según las variaciones en los costos observados en el proceso de comercialización.
El objetivo de la medida es facilitar el ejercicio de las libertades contractuales en el marco de los principios de libertad de mercado. Según el texto oficial, la desregulación del mercado de precios del GLP busca promover una mayor eficiencia económica, estimular la inversión y fomentar una competencia más amplia, alineando el mercado local con estándares internacionales.
El Programa Hogar, creado en 2015, era una herramienta clave para garantizar el acceso al gas en hogares de bajos recursos, especialmente aquellos sin acceso a la red de gas natural. Hasta ahora, el programa subsidiaba aproximadamente el 80% del costo de las garrafas de 10, 12 y 15 kilogramos. Sin embargo, la reciente resolución 216 publicada en el Boletín Oficial elimina los precios máximos y establece en su lugar un “precio de referencia” para las garrafas.