El municipio capitalino destacó al paraje Juan Caro, ubicado en el extremo Norte de la ciudad, como el atractivo natural más importante de la Capital.
Para la comuna, Juan Caro "se consolida como uno de los puntos ideales para el turismo y el deporte al aire libre".
Alfredo Salinas, director de Preservación de Flora y Fauna del municipio destacó "el gran caudal de gente" que va a Juan Caro. "Por suerte no se han registrado ningún tipo de accidente, los capitalinos eligen este lugar, el ambiente que se vive es de un contexto familiar, armónico, concientizamos sobre el manejo de los residuos y eso es gracias a un trabajo continuo que hay que reforzar, se logró una adaptación amigable de la gente con esta reserva natural cuidando la flora y la fauna, permitiendo el ingreso de grupos reducidos, que se introducen en intervalos de tiempo”, comentó.
Salinas informó que se puede ingresar por un camino de tierra que nace en la zona conocida como Pozo de Vargas, siguiendo al mismo se llega a una posta de control de la Municipalidad donde se comunica todo lo necesario para vivir la experiencia. “Aconsejamos que lleven pantalones largos porque es una zona selvática, alguna colación, repelente, agua y gorra. En la posta se le toman los datos personales, y se les consulta hacía donde quieren llegar, si no lo saben se los asesora y además hay la cartelería con la información para que puedan llegar a destino”, explicó.
En cuanto a las obligaciones de los visitantes, especificó que deben “cuidar el acueducto que hay a lo largo del lugar, ya que es utilizada como agua de consumo por los pobladores, por lo que los visitantes pueden consumir pero no pueden bañarse o lavar sus pertenencias en ellas”.
Respecto a los residuos, el funcionario destacó que “en el sector no hay ni habrá contenedores, la idea es que la gente se haga cargo de lo que genera, además pedimos que si ven basura que no haya sido generada por ellos, la levanten para preservar este espacio verde”.
Por último, recalcó que el paraje Juan Caro “es un lugar de tránsito, no de permanencia, por eso la gente que ingresa tiene un cierto tiempo para llegar a la cascada y volver, la cantidad de personas máxima por grupo es de 5 personas, no más y los grupos tienen una distancia de 30 minutos para prevenir la acumulación de gente”.