El proyecto de la “Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los argentinos”, que presentó el presidente Javier Milei ante la Cámara de Diputados, tiene su capítulo 3 dedicado íntegramente a la “Cultura”, donde se destina una buena parte a desfinanciar la industria del cine.
El texto del proyecto de Ley ómnibus confirma, en el artículo 564, que el Fondo de Fomento para la actividad cinematográfica local, a cargo del Incaa, sufrirá un recorte en su financiamiento y se eliminará su principal fuente de financiación, que es el 25% del total de los fondos aportados por el Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom). El Incaa continuará con el fondo del 10% aplicable “al precio de venta o locación de todo tipo de videograma grabado” (eso estipula la histórica Ley de Fomento Cinematográfico) y el proyecto del Ejecutivo dice, además, que los fondos para el fomento cinematográfico a partir de ahora surgirán de “los recursos que determine el Presupuesto Nacional”.
Este desfinanciamiento significa un grave atentado no solo con la industria de cine nacional, sino con la posibilidad de realizar producción propia, con nuestra idiosincrasia, costumbres e identidad; y afecta principalmente a las fuentes laborales de productores y cineastas de todo el país, ya que para la gran mayoría de las producciones nacionales es prácticamente imposible de producir sin el Fondo de Fomento.
Otro de los puntos graves de este proyecto es el desfinanciamiento que sufrirá la Escuela Nacional de Experimentación y Realización Cinematográfica (Enerc), una de las escuelas de cine más prestigiosas de latinoamérica, que forma a productores, directores, cineastas, entre otros; la cual corre riesgo de ser desfinanciada y desaparecer.
Para entender la gravedad de esta situación, La Red dialogó con Hebe Strabou, directora de Cine del Ministerio de Turismo y Culturas de La Rioja, quien explicó que el Incaa es un “instituto autárquico” que tiene varios fines y objetivos: “no solo se encarga de financiar películas y producciones audiovisuales, sino también de exhibirlas, exportarlas y trabajar con la comunidad”. La Rioja cuenta con el espacio Incaa (Espacio 73) destinado a la visibilización, exhibición y difusión de producciones nacionales. Además, se realizan distintos talleres en comunidad y el ente cuenta con las mejores instituciones educativas del país, como el antes mencionado Enerc. “En nuestra región una se encuentra en Jujuy y otra en San Juan, además hay distintas sedes en Formosa, Rosario, Mar del Plata, Neuquén, Comodoro Rivadavia y la de Buenos Aires”, explicó. La Enerc a nivel nacional tiene 550 estudiantes en todas las carreras y aproximadamente 120 ingresantes.
En La Rioja, desde la Dirección de Cine se trabajó en distintos ejes, articulados principalmente por la formación; donde se realizaron talleres de producción, montaje, animación, entre otros. Otro de los ejes trabajados fue el fomento; la exhibición de producciones trabajadas, la defensa del patrimonio audiovisual, y se desarrollaron grandes despliegues como lo fue la serie Menem, que contó con locaciones riojanas y dio trabajo a más de 38 técnicos locales y 200 artistas de nuestra provincia.
El Espacio Audiovisual Nacional (EAN), integrado por diferentes colectivos del sector, alertó en un comunicado que la industria audiovisual “genera trabajo genuino para más de 600 mil personas y representa el 5,2 por ciento de la economía” de manera directa e indirecta”
En cuanto a la forma de Gobierno del Incaa, el proyecto incorpora reformas en su conformación. Pasará de estar compuesta por un presidente, un vicepresidente, un Consejo Asesor con 11 miembros votados democráticamente por los realizadores y secretarios culturales de cada región, y la Asamblea Federal, compuesta por las autoridades máximas de cultura de cada una de las provincias. “Con la reforma, se reduciría a tener 8 miembros que los elegiría el presidente. Es decir que las políticas del INCA de federalización de distribución de recursos y concursos se verá decidida únicamente por el presidente. Esto quita la pluralidad, el espacio de participación y la mirada federal que había plantado el espacio”.
Otro de los puntos del proyecto de Ley ómnibus es que busca derogar artículos clave de la Ley de Cine (N° 17.741), entre ellos la promoción de la cuota de pantalla, “se promovía una sala comercial decine tenga el estreno de películas argentinas para defender el cine nacional; también se busca derogar la clasificación de salas, clasificación de películas de interés. Todo eso que se venía trabajando de forma organizada y hará un daño a toda la industria”, explicó Hebe Strabou.