El Gobierno argentino y representantes del Fondo Monetario Internacional (FMI) acordaron este lunes continuar con la revisión de los datos económicos y sus proyecciones con el fin de llevar adelante el programa de crediticio por US$ 44.000 millones acordado entre las partes.
Así lo informaron fuentes oficiales del Palacio de Hacienda luego de una reunión mantenida este lunes por la tarde en la Casa Rosada, de la que participaron el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y el ministro de Economía, Luis Caputo.
Además de Cubeddu, subdirector del Departamento del Hemisferio Occidental, y Ahuja, Jefe de la Misión, participó por el organismo multilateral Ben Kelmanson, representante del FMI en Argentina.
Desde el Ministerio de Economía consideraron que la reunión “fue positiva” y que los equipos técnicos “seguirán trabajando en los próximos días con la intención de emitir un comunicado en conjunto con las conclusiones de la visita”. Según fuentes oficiales, los funcionarios del organismo permanecerían en Buenos Aires hasta el miércoles.
Como suele ser habitual ante revisiones trimestrales, el Gobierno y el Fondo Monetario realizarán un comunicado acordado entre ambos lados de la mesa con las conclusiones de la visita. Hasta este lunes el FMI no hizo comentarios sobre el resultado de las conversaciones de este fin de semana y de la reunión en la Casa de Gobierno. Este jueves, por otra parte, hablará en conferencia de prensa la portavoz del FMI Julie Kozack, que podría anticipar cuál es la visión general que tiene el organismo sobre la marcha de las negociaciones.
Antes del encuentro, que comenzó alrededor de las 15 y que se llevó a caco en el Salón Eva Perón, el vocero presidencial, Manuel Adorni, expresó que el Gobierno busca “reflotar el acuerdo caído” con el FMI a partir del “incumplimiento sistemático de metas que ha tenido el país” con ese organismo.
“Todo lo que estamos haciendo está en línea con que con creces van a ser satisfechas esas nuevas metas que se impongan, porque el plan que estamos llevando adelante es de un orden en las cuentas y varios aspectos de la economía y no debería haber ningún tipo de inconveniente”, ahondó el vocero presidencial.