
La reconfiguración del mapa comercial en La Rioja toma fuerza tras la pandemia. Alquileres elevados, cambios en los hábitos de consumo y nuevas dinámicas de ventas impulsan a muchos negocios a trasladarse fuera del microcentro.
En los últimos años, numerosos negocios decidieron cerrar sus puertas en el microcentro para reubicarse en la zona sur de la ciudad, una tendencia que, lejos de frenarse, parece consolidarse. Según explicó Juan Keulian, presidente del Centro Comercial La Rioja, este fenómeno comenzó a gestarse durante la pandemia, pero sus causas estructurales persisten: “Ese es un problema que viene de largo, viene de la época de la pandemia. Evidentemente los alquileres en el microcentro son altos y algunos comercios no pueden pagar esos alquileres y se van a la periferia”, indicó.
El sur de la capital riojana se ha transformado en un nuevo polo comercial, con alquileres más accesibles y un rendimiento que, en muchos casos, iguala al del centro. “En la zona sur se han creado conjuntos de comercio bastante interesantes que están trabajando bien, con alquileres más bajos y con una venta casi similar a la del centro”, sostuvo Keulian.
Este cambio también se enmarca en una transformación más amplia: la digitalización del comercio. “Hay una serie de cambios en la comercialización que son las redes sociales, internet, etc. Así que, bueno, los comercios van a tener que ir adaptándose a esa realidad”, agregó el dirigente.
Para Keulian, el microcentro no desaparecerá como eje comercial, pero su perfil cambiará: “Yo creo que el centro va a tender a ser más bien exclusivo, para cosas exclusivas. Comercios de cadenas nacionales y que venden productos más específicos”.
Mientras tanto, barrios como la zona sur continúan consolidando su oferta y atrayendo a consumidores locales, marcando un nuevo ritmo en la vida comercial riojana.