Con un 88% de ocupación hotelera en general, la provincia mantuvo un movimiento constante de turistas a lo largo del fin de semana largo. La Red dialogó con el director del Centro Comercial, Juan Keulian, para conocer cuál fue el impacto económico en el sector.
En este sentido, Keulian señaló que si bien el sector gastronómico y hotelero se vieron beneficiados, otros negocios enfrentaron dificultades para obtener rentabilidad durante el feriado: “El sector gastronómico y hotelero, obviamente son los más beneficiados. Lo que pasa es que en el turismo el resto de los negocios se benefician a posteriori, porque evidentemente los gastronómicos y los hoteleros tienen que reponer cosas, hacer mantenimiento o cambiar sábanas, etcétera, y entonces generalmente hay un movimiento posterior. Que no es importante, pero todo ayuda. Y el otro sector que se mueve son los regionales. Y, lógicamente el problema que tenemos en La Rioja, que todavía somos un lugar de paso en la ciudad. Lo que sí se movió muy bien fue el interior, toda la zona de Talampaya y la costa de Anillaco”.
“El problema en La Rioja capital es tener que abrir el comercio en feriado para vender un pantalón; es antieconómico”, afirmó Keulian. Explicó que los turistas rara vez realizan compras importantes durante los feriados, lo que hace que abrir los comercios no sea rentable debido a los altos costos de energía y personal.
Además, Keulian destacó la necesidad de mejorar la infraestructura turística en La Rioja, incluyendo la oferta hotelera. Subrayó que, a diferencia de otros destinos turísticos, en La Rioja aún falta desarrollar una cultura que reconozca la importancia económica del turismo.
“En el tema turismo todavía nos falta un montón, no es cierto, no solamente en la parte cultural que es de lo que estamos hablando ahora, sino también en infraestructura, infraestructura hotelera, etcétera”, y agregó que: “En La Rioja no, no tenemos la cultura general para decir que el turismo es un negocio donde el el aporte de plata es muy importante”.