El abogado que ejerce la defensa de los docentes y directivos de la escuela Nº 37 del barrio Pango, Gustavo San Marcos, manifestó en La Mañana de La Red: “Se me encomendó la defensa técnica de los docentes en lo administrativo del personal que fue sumariado, en principio del profesor Amaya, quien fue suspendido”.
“Desde AMP estamos tratando de determinar las responsabilidades que les competen a cada uno de los ministerios, principalmente al Ministerio de Educación y al Ministerio de Desarrollo Social”, adelantó el letrado.
Por otra parte, San Marcos remarcó: “El reclamo judicial está orientado no solo a proteger a los directivos y docentes de la escuela Pango, sino a todos los maestros y los directores y autoridades de las escuelas de la provincia”, y añadió: “Se los ha puesto en una situación ajena a su función pedagógica”.
“Se les ha encomendado una función que es extraña a su trabajo diario, que ellos no tienen porqué conocer ni saber cómo manejar”, insistió el letrado.
Asimismo, el abogado de AMP detalló: “Se les entrega un dinero para esa copa de leche que en más de un caso es de dudosa legalidad la rendición de cuentas que se realiza ante Desarrollo Social”.
“La medida judicial va a tender a que estos profesionales de la educación dejen de realizar esa función”, adelantó San Marcos.
A su vez, la defensa de docentes y directivos aclaró: “De la noche a la mañana se decidió este procedimiento de dudosa legalidad en el cual se les transfiere esta responsabilidad”, y apuntó: “Tienen que salir a buscar precios, ponen sus vehículos y no se les reconoce ni el combustible”.
“Acá está pagando los platos rotos alguien que no tiene nada que ver porque no se dedica al comercio, es un docente al cual le encomendaron una tarea ajena a su función, y lo terminaron sancionando porque había que poner la cabeza de alguien sobre la mesa”, concluyó la defensa de Amaya, Gustavo San Marcos.