Los jubilados y pensionados perderán poder adquisitivo este año “por debajo de la situación experimentada en 2018”, según indica un informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF).
El informe señala que “la recuperación real que comenzaría a evidenciarse en el segundo semestre de 2019 resulta auspiciosa de cara al año 2020”.
De acuerdo al esquema de incrementos fijado por ley los aumentos para el primer semestre del año quedaron definidos en 11,8% y 10,8% para marzo y junio, respectivamente. Por lo tanto, el haber jubilatorio mínimo subirá a $10.411,1 en marzo y a $11.534 en junio.
Los cálculos están hechos en base a proyecciones sobre la evolución de la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE) para 2019, que a su vez está atada a la suerte de las negociaciones salariales de este año, en base a una inflación del 29%.
“Del análisis mensual del haber jubilatorio real surge que se ubicaría por debajo del nivel general de precios en el primer semestre de 2019 y recién podrían comenzar a recuperar en términos de poder adquisitivo en la segunda mitad del año”, señala el IARAF.
El reporte sostiene que en ese caso las jubilaciones “terminarían en el mes de diciembre experimentando un crecimiento real igual al 17% con respecto a diciembre de 2018, en el caso de un escenario optimista del RIPTE”, es decir, a partir de una recuperación real de salarios del sector registrado.
En cambio, se señala que “si el RIPTE registra un escenario moderado (los salarios no suben más que la inflación), el haber real en diciembre denotaría una mejora en torno del 14% en relación con igual mes del año 2018”.
De tal modo, el IARAF estima que “el poder adquisitivo anual del beneficiario volvería a perder frente a la evolución de la inflación en el año 2019; independientemente del sendero que transite el RIPTE en el primer semestre del año”.
“En números se tiene que, si el RIPTE registra una performance optimista, el haber real acumulado durante el año 2019 se ubicaría un 1,6% por debajo del haber real acumulado durante 2018; considerando aquellos beneficiarios que percibieron el bono de $750 en marzo de 2018. Si el bono percibido en marzo de 2018 fue de $375, la pérdida real en 2019 significaría el 1,3%”, considera el informe.
En tanto, se señala que “si el RIPTE transita una recuperación moderada, la pérdida anual del haber real en 2019 alcanzaría el 2,3% en relación con el poder adquisitivo de los beneficiarios que percibieron el bono de $750 en marzo de 2018” mientras que “para aquellos beneficiarios que cobraron el bono de $375, la pérdida real en 2019 resultaría del 1,9%”.
El IARAF indica que “al desagregar la dinámica de los haberes jubilatorios en 2019 por trimestres se observa que, durante los primeros 2 trimestres del año el haber acumulado se ubicaría por debajo en relación con igual período del año 2018 y comenzaría a recuperarse en los últimos dos trimestres del año 2019”. “No obstante, la recuperación real en el tercer y cuarto trimestre del año no resultaría suficiente para compensar la pérdida real de los haberes en los primeros dos trimestres”, añade el estudio. El informe explica que en el primer trimestre se conjuga “una presencia inflacionaria aún elevada y una actualización en marzo que no resultaría suficiente”. Eso es porque en igual mes de 2018 se otorgaron los bonos por el empalme de fórmulas. De modo que las pédidas llegarían al 13,8%.
Fuente: ambito