La Sala Unipersonal de la Cámara Tercera en lo Criminal y Correccional, bajo la dirección de Sara López Douglas, condenó en modalidad de juicio abreviado, a Roberto Carlos Agüero a una pena de un año y seis meses de prisión de cumplimiento condicional. Agüero fue considerado culpable del delito de lesiones leves calificadas por el vínculo en grado de violencia de género en flagrancia, según informó la Función Judicial.
López Douglas determinó que esta situación fue tratada como un acto de violencia contra la mujer. Por lo tanto, además de la condena impuesta, Agüero deberá cumplir, durante tres años, varias reglas de conducta. Estas incluyen comunicar cualquier cambio de domicilio, no cometer nuevos delitos, abstenerse de consumir estupefacientes y moderar el consumo de alcohol. Asimismo, se le prohíbe acercarse al domicilio de la víctima, a lugares de su frecuencia habitual en un radio de 300 metros. También se le impone la prohibición de comunicarse con la víctima por cualquier medio. Además, se le ordena recibir tratamiento psicológico para adoptar conductas con perspectiva de género y evitar actos de agresión hacia el género femenino.
El expediente también incluye la intervención de la Dirección General de Asistencia a la Víctima de Delitos. Se registró el consentimiento de la víctima para llevar a cabo el procedimiento de juicio abreviado y la imposición de la pena correspondiente. Además, se solicitaron medidas de restricción, incluyendo la prohibición de acercamiento y comunicación.
Finalmente, se han enviado oficios a la Unidad de Asistencia a la Víctima, a la Secretaría de la Mujer y a la Oficina de Género del TSJ para brindar el apoyo necesario a la mujer.
Los hechos objeto de la imputación tuvieron lugar el viernes 10 de noviembre de 2023, durante la madrugada, en el domicilio de la víctima, ubicado en el barrio Francisco Primero. Durante una discusión en la vivienda, Agüero agredió a su novia con un golpe de puño en la cabeza, tras lo cual se dio a la fuga. La víctima alertó a las autoridades a través de una llamada al 911, y la policía logró detener al agresor a pocos metros del lugar del incidente.