En un contundente discurso durante la apertura de sesiones ordinarias de la Asamblea Legislativa bonaerense, el gobernador Axel Kicillof volvió a expresar su rechazo a las recientes declaraciones del presidente Javier Milei, quien amenazó con intervenir la provincia de Buenos Aires. Kicillof calificó el mensaje del mandatario nacional como un acto de “inédita gravedad institucional” que no puede ser ignorado.
“El presidente de la Nación amenazó con intervenir la provincia y pretendió echar al gobernador por las redes sociales”, lamentó Kicillof, quien enfatizó que estas afirmaciones no son meros ataques personales, sino un ataque a la democracia y al federalismo. El gobernador recordó que fue reelecto por casi 20 puntos de diferencia en las últimas elecciones, donde la fuerza política de Milei fue derrotada en tres instancias.
Kicillof describió el planteo de Milei como “una distopía tragicómica” y lo instó a recordar que “con la democracia y el federalismo no se juega”. A su juicio, las agresiones del presidente forman parte de una estrategia sistemática contra los gobernadores provinciales y el federalismo en Argentina. “Los gobernadores no somos empleados del presidente. Representamos a nuestro pueblo y tenemos la obligación de defender sus derechos e intereses”, afirmó.
El gobernador también subrayó que “la provincia de Buenos Aires no se somete a amenazas ni a extorsiones”, y prometió que su administración seguirá trabajando con todas las provincias, independientemente del signo político. “Esa es nuestra manera de honrar la solidaridad, la Justicia social y los principios que nos unen como pueblo. Nadie se salva solo”, añadió.
En relación a las políticas económicas propuestas por Milei, Kicillof consideró que se trata de un plan que busca aplicar ajustes severos, tarifazos y desregulación económica, lo cual ha llevado al país a una situación crítica. Además, cuestionó las negociaciones del gobierno para contraer nueva deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI), calificando dicho acuerdo como “una estafa piramidal”.
El discurso de Kicillof refleja una creciente tensión entre el gobierno provincial y nacional, destacando la importancia del respeto al federalismo y los derechos democráticos en Argentina.
Fuente: NA
