
La familia de María Inés Quintero, conocida afectuosamente como Nené, presentó, en una marcha que se realizó ayer en la ciudad de Aimogasta, un contundente «Pedido de Justicia por la Muerte de María Inés Quinteros». El documento, firmado por sus seres queridos, amistades y diversas organizaciones sociales y de derechos humanos , fue dirigido al Poder Judicial, Ministerio Público Fiscal, Fuerzas de Seguridad, Organismos de Derechos Humanos y todas las autoridades competentes.
En el mismo, expresaron «profundo dolor, consternación e indignación» ante el fallecimiento de esta Profesora de Historia , quien en vida fue una persona valiosa, buena gente y víctima de distintas formas de violencia.
El cuerpo de Nené fue hallado tras varios días de intensa búsqueda , y la causa de su muerte fue atribuida preliminarmente a un presunto suicidio. Sin embargo, la familia de María Inés, incluyendo a sus hermanas, hermanos y sobrinas, «han expresado con claridad que esta hipótesis no es aceptable como conclusión definitiva». Argumentan que «no existen hasta ahora pericias técnicas suficientes, completas y transparentes que descarten la participación de terceros ni que aclaren de manera fehaciente las circunstancias de su muerte».
Ante esta situación, la familia y los firmantes del petitorio exigieron una serie de acciones concretas:
- La realización de todas las pericias forenses, toxicológicas, entomológicas y técnicas necesarias, con la intervención de peritos especializados independientes que garanticen transparencia y objetividad.
- La apertura completa del expediente, permitiendo el acceso de la familia y su representación legal a cada documento, informe y registro vinculado a la investigación.
- El compromiso real de las autoridades judiciales, policiales y forenses para llevar adelante una investigación exhaustiva y sin condicionamientos, respetando la memoria y dignidad de María Inés.
- La suspensión inmediata de cualquier intento de cierre de la causa basado en hipótesis no comprobadas ni debidamente fundamentadas.
- El acompañamiento activo de organismos de derechos humanos, instituciones y referentes sociales, para que el proceso cuente con control ciudadano y apoyo a la familia.
El documento enfatiza que «María Inés no puede ser reducida a una estadística». Su historia, su vida y su integridad «merecen respeto». Se recalcó que «el derecho a la verdad y a la justicia no puede ser vulnerado bajo ningún argumento de conveniencia o apresuramiento». La búsqueda de la verdad y la justicia deben ser una «prioridad absoluta» para identificar a los responsables de un delito, reconocer y reparar el daño causado a la víctima y evitar la impunidad.
Familiares, amigos y organizaciones se unieron en este pedido de justicia, memoria y verdad , reafirmando que «ningún caso puede darse por cerrado hasta que se agoten todos los medios de prueba, se esclarezcan los hechos, se determine con certeza qué sucedió y, finalmente, se aplique todo el peso de la ley a los responsables»