
A dos años de un trágico siniestro vial ocurrido en julio de 2023, la causa que investiga las gravísimas lesiones sufridas por el joven Alejandro Gaitán podría quedar en la impunidad. Así lo advirtió el abogado querellante Franco Barrera.
El letrado, en una entrevista con Radio La Red, denunció que la defensa del imputado, el ex chofer de Rioja Bus Alan Oliva, busca que el caso no sea elevado a juicio. El expediente, que ya está en etapa de apelación, podría ser desestimado por la Cámara Tercera.
Un hecho que dejó secuelas irreversibles
El siniestro ocurrió cuando Alejandro Gaitán, que circulaba en motocicleta, fue embestido por el auto de Oliva. Inmediatamente después del choque, el test de alcoholemia al conductor arrojó 1,33 gramos de alcohol en sangre, una prueba que la defensa ahora busca anular.
El abogado Barrera detalló la dramática situación del joven: «El daño civil es irreversible, porque el chico no se va a poder alimentar nunca más». Agregó que Gaitán se alimenta a través de una sonda en el estómago, usa pañales y sufre de ataques de pánico. Su hermana ha tenido que dejar todo para cuidarlo a tiempo completo.
La lucha contra la impunidad
“El proceso está vaciado de punta a punta”, expresó el abogado, que lamentó que la defensa se enfoque en “defectos procesales” para lograr el sobreseimiento. “Él lo que busca es la impunidad, porque podría haber hecho una reparación del daño y no lo hizo”, sostuvo Barrera, criticando además la falta de «carácter humano» de la defensa de Oliva.
Finalmente, el abogado de la familia Gaitán hizo un llamado a los medios y a la sociedad: «Si no se da visibilidad a este caso, va a quedar en la nada. El expediente ya está preparado para que quede sobreseído».