
En un giro positivo, la actividad manufacturera de las pequeñas y medianas empresas (PyMEs) experimentó un aumento del 2,4% en octubre en comparación con el mismo periodo del año anterior. Este repunte marca el fin de una serie de cuatro meses consecutivos de descensos, brindando un respiro al sector.
Sin embargo, a pesar de este crecimiento, la producción acumula una caída del 0,5% en los primeros diez meses del año. A nivel mensual, se observó un significativo incremento del 9,8%, impulsado por una demanda en crecimiento atribuida a las políticas de ingreso implementadas por el Gobierno en el último mes.
Las empresas operaron con el 71,8% de su capacidad instalada, 1,2 puntos porcentuales por debajo de septiembre. Este hecho llevó a las industrias a recurrir al uso de stocks existentes para satisfacer la demanda mensual, explicando así el crecimiento de la producción en octubre. Sin embargo, surge la preocupación sobre la sostenibilidad a largo plazo de este incremento.
Se han identificado complicaciones en la adquisición de materias primas e insumos en diversos sectores. La preocupación de algunos proveedores extranjeros por las demoras en los pagos persiste, mostrando una tendencia creciente que complica las relaciones comerciales.
Estos resultados provienen del Índice de Producción Industrial PyME (IPIP), elaborado por CAME, con una muestra que alcanzó a 409 industrias PyME a nivel federal.
Fuente: CAME