Según datos de la Organización Mundial de la Salud, este hito alcanzaría al vacunar contra el Virus Papiloma Humano al 90% de los niños y niñas de 11 años para 2030. La opinión de los expertos a Infobae.
Una de las enfermedades que más está creciendo y peor pronóstico tiene a futuro es el cáncer de cuello uterino, causado en su inmensa mayoría por el Virus Papiloma Humano (VPH), que mata a cientos de miles de mujeres cada año.
El VPH es una familia de virus de transmisión por vía sexual que afecta tanto a mujeres como a varones. Existen más de 100 diferentes tipos de VPH y se sabe que la infección persistente por, al menos, 14 de ellos causan ciertos tipos de cáncer que pueden ser cervical, vulvar, vaginal, anal y el orofaríngeo. Otros tipos de VPH son responsables de las verrugas genitales.
De acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), “prácticamente todos los casos de cáncer cervicouterino (99%) están relacionados con una infección genital por el VPH”. En la Región de las Américas, esta infección causa cada año 72.000 casos de cáncer cervicouterino y 34.000 muertes debidas a esta enfermedad. Además, esa entidad estima que la prevalencia regional del VPH era de un 16,1% en 2017.
La OMS estimó que, en 2017, la prevalencia de VPH en mujeres era de 11,7% y del 21% en hombres, en todo el mundo. “Si se mantienen las tendencias actuales, se prevé que el cáncer cervicouterino aumente en América Latina y el Caribe en un 27% por lo que respecta al número de nuevos casos y en un 34% por lo que respecta al número de muertes para el 2030.
“Se calcula que al menos la mitad de las mujeres y hombres sexualmente activos contraerán la infección en algún momento de sus vidas y, dentro de este grupo, por lo menos el 80% de mujeres habrá contraído una infección genital por VPH al llegar a los 50 años”, alertó a Infobae la médica infectóloga Hebe Vázquez (MN58353), de Helios Salud, que recomendó la herramienta más eficaz para frenar esta enfermedad mortal: la vacuna contra el VPH y la consulta médica.
“Como sabemos es importante que toda mujer consulte periódicamente a su ginecólogo, quien podrá, a través de los exámenes clínicos y complementarios como colposcopia y tamizaje cervical -prueba de Papanicolaou-, detectar precozmente lesiones del tracto genital e implementar un tratamiento temprano y adecuado. Además, las vacunas preventivas constituyen una herramienta fundamental”, sostuvo Vázquez
En ese sentido, la prestigiosa revista The Economist elaboró un gráfico que estima cuántas vidas se podrían salvar si más niñas y niños recibieran una vacuna contra el VPH existente. “Calculamos que se evitarían 2,65 millones de muertes adicionales si se alcanzara la meta, en 2030, del 90% de todos los niños y niñas vacunados”, afirma la publicación según datos estadísticos de la OMS, que estima que en la actualidad sólo el 12 % de los chicos fueron vacunados.
La doctora Florencia Cahn, coordinadora del comité científico en la Fundación Vacunar, explicó que “la población en general asocia erróneamente al VPH con la mujer, pero este virus afecta tanto a hombres como mujeres. Si bien el VPH es responsable del cáncer de cuello de útero en la enorme mayoría de los casos, es fundamental la información para que toda la población conozca y comprenda que el VPH afecta a todos. Esta asociación está tal vez relacionada con que los calendarios de vacunación en el mundo incorporaron primero la vacuna contra el VPH para la mujer y luego fueron sumando a los hombres; incluso mucha gente piensa que es una vacuna solamente para la mujer”.
En tanto, la doctora Vázquez resumió 4 razones por las cuales los hombres también deberían vacunarse: “En primer lugar, el riesgo de infección persiste a lo largo de toda la vida sexual activa, en segundo lugar la protección, es decir las defensas, que se generan posterior a la infección es específica para el tipo de VPH que la provocó, pero no protege contra otros tipos del virus” por lo que puede producirse reinfecciones. En tercer lugar, la protección después de la infección suele ser débil o moderada, con lo cual los hombres se pueden volver a infectar con el mismo tipo de VPH, lo que se denomina recurrencias, y la cuarta razón es que las vacunas son seguras y han demostrado ser eficaces en hombres”, sostuvo.
Cuáles son las medidas preventivas
Todas las organizaciones vinculadas a la salud coinciden en que la prevención de la infección por VPH se basa en la educación sexual integral, los estudios ginecológicos periódicos y la vacunación. En Argentina se dispone de dos vacunas contra el VPH, una tetravalente, con protección contra cuatro genotipos y una nonavalente con protección contra 5 genotipos adicionales.
La vacuna tetravelente está incluida en el Calendario Nacional de Vacunación para niños y niñas de 11 años de edad, en dos dosis, con un intervalo mínimo de 6 meses, después de la primera dosis. Es gratis en todos los vacunatorios, hospitales públicos y centros de salud del país. No está indicada la vacunación en personas alérgicas a los componentes y en embarazadas. Deben consultar al médico, quienes tengan fiebre mayor a 38º C o estén cursando una enfermedad aguda de moderada a severa.
¿Qué vacunas están disponibles en la Argentina?
-La vacuna bivalente aprobada para la prevención del cáncer de cuello de útero, vulva y vagina y ano, a partir de los 9 años.
-La vacuna cuadrivalente aprobada a partir de los 9 años para la prevención del cáncer de cuello de útero, vulva y vagina, cáncer anal y verrugas genitales
¿Quienes deben aplicarse la vacuna contra el HPV, según el Calendario Nacional de Inmunizaciones?
Según el Calendario Nacional las personas que deben vacunarse son:
-Niñas y niños a los 11 años -vacuna cuadrivalente en Calendario Nacional-.
-Varones y mujeres entre 11 y 26 años que vivan con HIV y quienes hayan sido trasplantados -órganos sólidos o células hematopoyéticas-, deberán recibir la vacuna cuadrivalente contra HPV.
Fuente: Infobae