Una tormenta de rápida intensidad sorprendió a los capitalinos esta mañana, dejando lluvia, granizo y viento en varios sectores de la ciudad. En menos de una hora, el clima cambió drásticamente, afectando el tránsito y provocando inconvenientes en diferentes puntos de la capital. A pesar de que el registro de precipitación fue leve, los efectos fueron inmediatos, especialmente en áreas donde el granizo acumulado dificultó el paso vehicular.
Este fenómeno climático se presenta en un contexto complicado, marcado por la crisis hídrica que afecta tanto a la Capital como a toda la Provincia. La lluvia, aunque escasa, es recibida como un alivio para los habitantes, sobre todo en medio de los días de altas temperaturas que se vienen registrando. Si bien la cantidad de agua caída no es suficiente para resolver la emergencia hídrica, su presencia brinda un respiro momentáneo en la lucha contra la sequía.
El viento también fue un factor importante, provocando la caída de ramas, postes del servicio eléctrico y arboles, lo que complicó aún más la circulación en algunas calles. Las autoridades recomiendan a los vecinos transitar con precaución, ya que los efectos de la tormenta podrían continuar durante las próximas horas.