HAMILTON, Nueva Zelanda (Enviado especial).- "Cuando lo pasaron a nitro, ya se nos fueron del partido", la frase de Matías Orlando, titular en la derrota de los All Blacks, es un buen resumen de lo que sucedió con los Pumas. Un buen primer tiempo, "buenos 50 minutos", como remarcó Daniel Hourcade, pero cuando Nueva Zelanda aceleró el partido se quebró.
Fue 57-22 el resultado final, con ocho tries para los All Blacks y uno para los Pumas, pero pese al dolor de la derrota, siempre algo se puede rescatar. Y así lo hace el equipo argentino. "Creo que tenemos que revisar el primer tiempo y tratar de mantenerlo un poco más. Está claro que ellos son temibles, pero eso fue positivo", destaca Javier Ortega Desio, quien por primera vez fue titular en el Rugby Championship.
"Creo que el primer tiempo fue bueno, parejo. Un poco los obligamos a acelerar a ellos. Pero cuando lo pasaron a nitro ya no tuvimos más chances, se nos fueron del partido", analizó Matías Orlando. "Seguro que ahora tenemos que mirar para adelante, se viene Australia y no será nada fácil", agregó.
Australia es el próximo rival de los Pumas, en una semana, en la ciudad de Perth. "Será un nuevo partido. Tenemos que analizar lo que nos dejó éste, pero los Wallabies seguro que serán un durísimo rival", comentó Hourcade, el entrenador del equipo argentino.
Al igual que todo el plantel, destacó lo realizado en la primera parte del partido, aunque se lamentó por no haberlo podido sostener un poco más. "Creo que la diferencia en el marcador fue un poco grande", dijo, pero sin quitarle méritos a unos All Blacks demoledores.
Fuente: La Nación