A través de un comunicado de prensa enviado desde el Gobierno, el titular de la empresa, Miguel Urtube, respondió a las asambleas.
“Aquí no hay minería a cielo abierto, no hay multinacionales, no se usa agua, que son las tres banderas que enarbolan estos sectores, somos una empresa de origen familiar”, remarcó Urtube. La empresa se encuentra en una etapa de análisis y prospección y se utiliza un proceso totalmente limpio.
El trabajo de la empresa, ubicada a 9 kilómetros de la ruta 11, sobre el cauce del Río Blanco, consiste en la obtención de partículas de oro a través del movimiento semi industrializado de áridos, sin uso de explosivos, químicos y agua, solamente se mueven los áridos de forma mecánica.
La planta, de pequeña escala, procesa los materiales en distintas etapas, de manera similar a cualquier planta de áridos tradicional, con dos descartes, uno superior y otro inferior. Se levantan los áridos del cauce, se los coloca en una tolva que separa las grandes piedras y luego el resto pasa a una zaranda vibradora, que realiza el descarte superior y se utilizan los intermedios, que van a concentración por gravedad y lo que queda en las trampas es lo que se utiliza.
Se aprovechan 5 kilos por tonelada y el resto de los áridos que no se utilizan queda en el mismo lugar. No se utilizan químicos de ningún tipo ni explosivos, ni siquiera agua en ninguna etapa del proceso,
Urtube resaltó que no entiende el accionar de este grupo de personas, a las que calificó como “verdaderos delincuentes, porque ya rompieron tas las instalaciones en abril de este año y ahora ni siquiera valoran el esfuerzo que se hace, sino que se oponen a la minería en general, porque esta actividad es casi como la de los pirquineros artesanales, solo que nosotros utilizamos una máquina para optimizar los resultados, sin químicos, agua ni explosivos, por lo que no hay manera de justificar este accionar”.