Miguel Zárate, Ministro de Seguridad, Justicia y DDHH se refirió a los allanamientos de los prestamistas en Catuna en la que quedaron involucrados dos efectivos de la policía. «Si hay cambios en la plana mayor, no tienen que ver con esto», dijo Zárate.
En este sentido, el secretario de Seguridad se refirió a los allanamientos en Catuna y a la depuración de la fuerza policial. Al ser consultado sobre si los allanamientos implicarían cambios en la plana mayor, Zárate respondió: “Si hay cambios no tienen que ver con esto, de hecho la plana mayor actúa en consecuencia, en la jefatura tienen claro cuáles son los lineamientos y los criterios, cómo debemos trabajar los distintos problemas y sobre todo cómo debemos actuar cuando hay algún policía involucrado ya sea en algún delito o en alguna conducta que se separe de la conducta o de la ética que tiene que tener un policía para tener el uniforme en la calle”.
«Hay policías que evidentemente deciden tomar otro camino y vamos a actuar en consecuencia y van a tener la sanción que merecen», afirmó Zárate. «Para mí hay policías que eligen dejar de ser policías y eligen dedicarse a otra actividad. Bueno, a esos los vamos a expulsar de la fuerza porque claramente no es la policía que necesita la gente en las calles«.
Zárate además aseguró que el objetivo es construir una policía «íntegra, creíble, cercana a la gente, confiable» y que, para ello, es necesario depurar a aquellos que se apartan de las normas.
«Vamos a defender, vamos a sostener, vamos a fortalecer a los policías que hacen bien su trabajo, a los que cumplen su régimen disciplinario, a los que respetan a las autoridades, a los que están cerca de la comunidad y los que cumplen las instrucciones en materia de seguridad pública. A los que no, vamos a tomar medidas», concluyó el ministro.
Cabe destacar que el jueves último en un operativo de gran magnitud, la División de Investigaciones de la Policía de La Rioja llevó adelante una serie de allanamientos en la localidad de Catuna, en el marco de una investigación por presunta defraudación. La causa, que lleva ocho meses de trabajo, culminó con la detención de dos personas y el secuestro de una importante suma de dinero y diversos elementos vinculados a la causa.
Al respecto se detalló que se incautaron $36 millones de pesos en efectivo, más de mil tarjetas de débito, siete vehículo y una gran cantidad de documentos y pagarés.
