Este viernes en el Salón Blanco de Casa de Gobierno se realizó el juramento de las nuevas autoridades de la Plana Mayor de la Policía de la Provincia; los cambios fueron dispuestos por el ministro de Gobierno, Justicia, Seguridad y Derechos Humanos luego de los hechos de público conocimiento ocurridos en la Escuela de Cadetes, que determinaron la posterior muerte del aspirante Emmanuel Garay.
La toma de juramento estuvo a cargo del ministro Alejandro Moriconi y contó con la presencia del vicegobernador Néstor Gabriel Bosetti, la vicepresidenta primera de la Cámara de Diputados, Adriana Olima; la ministra de Desarrollo Social, Griselda Herrera y otras autoridades.
En la lectura de juramento de los miembros de la Policía de la provincia, el ministro fue enfático al resaltar que deberán desempeñarse con lealtad, idoneidad y profesionalismo los cargos correspondientes, cumpliendo y haciendo cumplir la Constitución Nacional, la Constitución de la Provincia y “el respeto irrestricto por los derechos humanos”.
En este marco, Moriconi reconoció la labor que vienen realizando los hombres de la fuerza que hoy asumen como jefes de la policía de la provincia y agradeció el acompañamiento de las familias, sin quienes no sería posibles asumir en las responsabilidades que requieren los cargos.
“Hoy ante este juramento público, les digo que tienen una doble responsabilidad porque acaban de ser honrados por el pueblo para cumplir las leyes y mantener el orden basado en tres principios, la moral, las buenas costumbres y el cumplimiento irrestricto y la defensa de los derechos humanos”, sostuvo.
Por su parte, el nuevo jefe de la Policía expresó que “sin duda que hoy es un día muy especial, quiero agradecer la confianza de las autoridades de la provincia y mi familia quien me permite estar hoy donde estoy; gracias a los uniformados sin distinción de jerarquía, cada uno de mis cargos se lo debo a los efectivos de la calle, son quienes dan la cara y deben atravesar diferentes situaciones”, señaló Elizondo.
Finalmente, sostuvo “voy a acompañar y estar cerca de cada uno, para lograr una policía que responda a las necesidades de la gente, respetando principalmente los derechos de cada ciudadano”.