“Fuimos marea, y seremos tsunami”, habían prometido las mujeres para este 8M. Y así fue, hubo movilizaciones masivas en todo el país.
En la ciudad de Buenos Aires la principal concentración comenzó a las 16, con el Congreso de la Nación como destino unificado.
“Saquen la motosierra de nuestros derechos”, fue la consigna que más se leyó en los carteles de las manifestantes.
La convocatoria terminó con la lectura del documento elaborado por el colectivo Ni Una Menos, que recogía las principales demandas del movimiento feminista argentino. Entre estas demandas se destacaban la urgencia de combatir el hambre y el ajuste económico, la necesidad de garantizar el acceso al aborto legal, seguro y gratuito, así como la importancia de visibilizar y enfrentar la emergencia frente a la violencia de género, que continúa cobrándose vidas y vulnerando los derechos de las mujeres en todo el país.
“Estamos alertas y organizadas para resistir activamente todos los intentos de obstruir el derecho al aborto, demandamos su cumplimiento efectivo, universal y democrático. El derecho al aborto ¡Es Ley! Volvemos a decir: Educación Sexual para decidir, Anticonceptivos para no abortar, Aborto Legal para no morir”, expresaron.
A su vez, destacaron la “emergencia” en materia de violencia de género que viven las mujeres. “Hoy enfrentamos, nueve años después, una verdadera emergencia en violencia de género. Hay más de 70 femicidios en lo que va del año”, indicaron.
En esta misma línea cerraron: “Festejamos, nuevamente, la unidad del movimiento feminista y esta jornada histórica de lucha. Acá estamos en esta plaza y en todo el país en alerta y movilizadas. Decimos NI UN PASO ATRÁS. ¡Fuimos marea, y seremos tsunami!”.